¿Por qué los republicanos están furiosos con Trump y cómo podría afectarlo en su juicio político?
El presidente tomo una decisión que podría jugar en su contra
El presidente Donald Trump desató una polémica internacional por retirar las tropas de Estados Unidos de Siria, abandonando a los kurdos, un grupo que era su aliado.
Con la medida, el mandatario dejó el paso libre a que Turquía atacara en Siria en contra de los kurdos y el Estado Islámico, algo que –según expertos– permitiría a Vladimir Putin, presidente Rusia, invadir la región.
Esto ha causado descontento en Washington, D.C., y ha sumado un problema al mandatario, incluso de parte de los republicanos, quienes consideran las acciones como una traición a uno de los principales aliados de los estadounidenses en aquella región.
Incluso las críticas llegaron de históricos aliados del presidente Trump, como el líder del Senado, Mitch McConnell, quien ha defendido al mandatario ante varios frentes, pero ahora le da la espalda.
“La retirada precipitada de las fuerzas estadounidenses de Siria sólo beneficiaría a Rusia, Irán y al régimen de El Asad”, consideró MCConnell, quien advirtió que el Estado Islámico se reagrupará también.
A la voz del senador se han sumado otras de importantes republicanos, en un momento en que el presidente Trump requiere más aliados en el Congreso, sobre todo porque los demócratas avanzan con sus investigaciones para un posible juicio político contra el mandatario.
Al tener control de la Cámara, los demócratas tienen posibilidades de aprobar el proceso contra el presidente Trump, pero en el Senado los republicanos jugarían a su favor, al ser mayoría, aunque las recientes acciones del mandatario podrían llevar las cosas en diferente dirección. Ahora, incluso hay el temor de que los representantes de ese partido se sumen a sus opositores en el proceso contra el mandatario.
El exaspirante presidencial y senador, Mitt Romney, fue otro que se sumó a las críticas, sobre todo por la decisión confirmada por Trump de “abrirle camino” a Turquía.
“Turquía procederá pronto con su operación planeada hace tiempo en el norte de Siria. Las Fuerzas Armadas estadounidenses no apoyarán ni estarán implicadas en la operación”, dijo la Casa Blanca en un comunicado.
Este martes, aquella operación militar comenzó en Siria.
“Esta traición a los kurdos también dañará severamente nuestra credibilidad como aliados en todo el mundo”, dijo el senador republicano Patrick Toomey.