Beyoncé se sincera y habla sobre el aprendizaje que le dejaron sus múltiples abortos
"Primero tenía que ser una buena madre para mí misma"
La cantante Beyoncé ha vuelto a sincerarse sobre el impacto físico y anímico que tuvieron en ella los diferentes abortos espontáneos que padeció los antes de poder dar la bienvenida a su primogenita Blue Ivy en el año 2012. La intérprete, casada con el rapero Jay Z, repitió la experiencia en la maternidad cinco años más tarde con el nacimiento de sus mellizos Rumi y Sir.
En este caso, la diva de la música ha preferido centrarse en el cambio de mentalidad tan profundo y positivo que acabó experimentando como consecuencia de las circunstancias tan dramáticas, ya que finalmente aprendió a cuidar mejor de sí misma para tratar de evitar nuevos contratiempos y, de esta forma, estar mejor preparada de cara a sus próximos procesos de gestación.
“El éxito me resultó algo completamente diferente ahora He aprendidó con el tiempo que la pérdida y el dolor son también regalos que te proporcionan la vida. Haber tenido varios abortos me enseñó que primero tenía que ser una buena madre para mí misma antes de poder serlo para los demás “, ha explicado en una reveladora conversación con la revista Elle, justo antes de felicitar de cómo la maternidad ha transformado por completo sus preocupaciones.
“Luego tuve a Blue Ivy y mi búsqueda del sentido de la vida se volvió mucho más profundo. Es como si hubiera muerto y resucitado para marcarme objetivos más trascendentales. Dejar un legado es más importante que cualquier número uno, así como buscar en mi propio ser para descubrir quién soy en realidad”, ha aseverado en la misma entrevista.