La historia de amor entre Kirk Douglas y su esposa de más de medio siglo
Ambos demostraron que en Hollywood existen matrimonios fuerte
Kirk Douglas y su esposa Anne Buydens celebraron juntos 65 años de matrimonio. Ambos pasaron por muchos obstáculos en la vida como fama, guerra, traición y la muerte de un hijo, sin embargo lograron salir adelante y fueron hasta el final uno de los matrimonios más sólidos.
Antes de Anne estuvo casado con Diana Dill, sin embargo el matrimonio duró solo 8 años (1943-1951). Tres años después conocería a quien fuera su esposa por más de medio siglo. Kirk tenía un espíritu inquebrantable y escaló desde lo más bajo para superarse, ella por su parte viene de una familia adinerada sin embargo sobrevivió a la guerra, lo cual le afectó mucho.
Se conocieron a principios de los años 50, ella era traductora y especialista en relaciones públicas de la industria cinematográfica francesa. Él ya era famoso y se encontraba grabando una película.
Al principios no hicieron “click” de inmediato. Kirk la invitó a cenar pero ella se negó pues estaba cansada. El rechazo no agradó para nada al actor, pero su intriga por conocerla no se calmaría.Para cuando terminó la grabación de la película le ofreció un trabajo como asistente para no tener que separarse de ella.
Poco a poco se fueron conociendo y enamorando. Finalmente terminaron en el altar en el año 1954. Vinieron los niños, el crecimiento laboral y mucha felicidad. Él la consultaba en todo tipo de decisiones, pues ella lo conocía perfectamente. Ella se convirtió en su ángel guardián.
En 1996 el actor sufrió un derrame cerebral, tras el episodio el actor pensó en el suicido. Anne lo ayudó a salir de ese hoyo y logró sobrevivir más de 20 años después de eso. Sin embargo el periodo más difícil de su vida vino cuando su hijo menor, Eric, falleció. Ambos fueron su soporte pese al terrible dolor.
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Cuando hace unos años les preguntaron ¿cómo habían logrado para preservar su matrimonio por tanto tiempo? la respuesta fue que siempre tienen algo de qué hablar, las conversaciones nunca terminaron entre Kirk y Anne. Así, ambos son prueba de que el amor verdadero sí existe.