La mejor forma de guardar tu ropa de cama mientras no la ocupas
Al almacenar sábanas y cobijas debes procurar que se mantengan en buen estado
Para un buen descanso, una cama limpia es imprescindible. Esa sensación de las sábanas, cobijas y almohadas casi recién lavadas, brinda una tranquilidad indescriptible.
Pero, ¿qué hacer con las piezas que no ocupa? Las cobijas, más que las sábanas, suelen ocupara mucho espacio en el armario. Es por esta razón que te mostramos algunas estrategias de Architectural Digest para almacenarlas de manera adecuada y que se mantengan en perfectas condiciones hasta que las utilices.
1. Espacio oscuro y seco
Si no cuentas con un closet amplio, puedes tomar un cajón, baúl o hasta el inferior de la cama, en un respectivo contenedor a ras de piso, que te permita guardar toda la ropa de cama, aprovechando el espacio que tengas.
2. Aléjalos del polvo
Las bolsas de plástico no son la mejor opción porque puede afectar la tela de su ropa de cama y dejarlas amarillentas, además de que es posible que se guarde humedad. La mejor opción son las bolsas de tela bien lavadas. También puedes guardar las sábanas en las fundas de almohada más grandes que tengas.
3. Mantén el límite
Estamos seguros que hay muchas ropas de cama que llaman tu atención cada vez que vas a una tienda para el hogar, pero tanto esos artículos como las toallas, lo mejor será limitar el número de juegos a tres por persona o habitación dentro de la casa más uno adicional para invitados. Lo importante es no saturar tu casa con grandes volúmenes de colchas.
También es importante que la ropa de cama para invitados estén en un lugar al alcance y distinto al que usa con regularidad.