Los 6 errores de limpieza que seguramente haces en tu hogar y no te has dado cuenta
Las soluciones son fáciles, sólo recuerda no volver a cometer la misma equivocación de limpieza
Ahora que el COVID-19 ha invadido el mundo, una de las actividades predilectas para muchos estadounidenses es la limpieza obsesiva del hogar. Casi a diario: sacudir, limpiar, barrer, trapear, desinfectar superficies, electrónicos, lavar los trastes, la ropa. Y terminas el día satisfecho de haber hecho un excelente trabajo. Ahora queremos que te detengas un momento y revises si no estás cometiendo estos 6 errores de limpieza señalados por Reader’s Digest.
Error 1: usar el mismo trapo para todo
A pesar de utilizarlo con limpiadores, usar el mismo trapo en varios lugares de la casa es uno de los mayores errores dentro del hogar. El trapo se adhiere a la suciedad y lo único que ocasiona es que, mas que limpieza, traslades la suciedad de una superficie anterior a otra, arriesgándote incluso a llevar gérmenes del baño a la cocina o comedor.
La solución: tener un paño o trapo para cada área del hogar y, sin confundirlos, lavarlos después de usarlos o con cierta regularidad.
Error 2: uso de un plumero
Cualquier trabajo de marketing que asegure que un plumero atrapa el polvo, en realidad ninguno lo hace y sólo lo esparcen sobre la misma superficie o, en el mejor de los casos, cae al suelo. Lo mejor es dejar de ocuparlo y utilizar los paños.
Error 3: colocar un cepillo de baño nuevamente en su soporte de inmediato
Lavas el inodoro con este cepillo y posteriormente lo colocas en su molde de plástico creyendo que es lo mejor. Grave y asqueroso error. Los gérmenes de tu inodoro quedan atrapados en las cerdas de tu cepillo y se trasladan al soporte, contaminándose irremediablemente.
Después de hacer tus labores higiénicas con esta herramienta, deja que se seque a la intemperie, lavarlo en una cubeta con jabón, dejarlo secar de nuevo y hasta ese momento colocarlo en su soporte. Lo recomendable es darles unos cuantos usos, en el mejor de los casos hasta en 5 ocasiones y desecharlo.
Quizás consideres mejor conseguir una varita de baño con cabezales desechables e intercambiables para evitar arriesgarte a esparcir gérmenes de tu inodoro.
Error 4: lavar una tabla de cortar con jabón lavatrastes
Las grietas y cortes que se generan al ocupar la tabla, generan que partículas de alimento y hasta posibles microorganismos insalubres se alojen en esa zona sin poder ser alcanzados por tu esponja y jabón de lavatrastes.
Sea de madera o plástico, jamás se te ocurra ponerlo en el lavavajillas. Lo mejor es sumergirla en peróxido de hidrógeno o una solución de dos cucharadas de cloro por un galón de agua para que se pueda desinfectar de manera adecuada. Posteriormente puedes dar un enjuague y dejar que se seque por completo.
Error 5: rociar limpiador directamente sobre una superficie
Rociar un limpiador directamente sobre los muebles, las encimeras o el vidrio puede causar una acumulación de la solución, provocando muebles y superficies grasientas y ventanas con rayas. Ése no es el mayor problema, sino que ocasionaría que la suciedad y el polvo se adhiera más fácil a ellos. Siempre rocía cualquier solución en el paño.
Error 6: limpieza desde cero
¿A qué nos referimos? A un error de ciclo de limpieza. Barrer, trapear o aspirar el piso antes de limpiar los muebles, sacudir el polvo y migajas de una mesa, sólo va a provocar que debas volver a barrer, trapear o aspirar. La mejor manera de la limpieza siempre debe ir de arriba hacia abajo, tal como se mencionó en el método de las “3 olas” de Melissa Maker.