Jesús Mosquera: ¿Quién es el sexy protagonista de ‘Toy Boy’?
Su pasión estaba en el balón, pero una persona cambió su destino
Jesús Mosquera es el sexy protagonista que ha cautivado con su personaje de stripper en la serie ‘Toy Boy’ de Netflix, que si bien se estrenó sin mucho éxito en Atena 3 en España, en la plataforma se convirtió en un fenómeno mundial.
Sí, ‘Toy Boy’ se convirtió en la series más vistas de Netflix no solo en España, alcanzó el número uno en Estados Unidos, Brasil, Argentina, India, México y hasta una docena más en apenas quince días. Pero lo que poco se sabe es de dónde salió su protagonista: Jesús Mosquera.
Pues hasta hace poco él tampoco sabía que se convertiría en uno de los hombres más buscados, de hecho ni se imaginaba que podría ser actor ya que, desde muy pequeño, su destino era el soccer y en los estadios se convirtió en un profesional pero del balón.
Nacido en Fuengirola, Málaga, Jesús solo pensaba en ser un gran jugador de fútbol. En la posición de defensor, a los 12 años ingresó al Málaga, hasta que a los 16 el Athletic de Bilbao se fijó en él. Se trasladó a vivir a Euskadi. A los 18 años, prefirió volver a su a tierra natal y jugó en el Málaga B, en el Betis B y finalizó su carrera en el Antequera Club de Fútbol.
Pero todo cambió el día que los responsables del casting de la serie ‘Toy Boy’ lo descubrieron en un gimnasio, lo invitaron a una prueba de cámara para un papel pequeño, y se quedó con el protagónico.
Jesús se trasladó de Málaga a Madrid, donde trabajó el personaje con coaches de interpretación y baile durante más de 8 meses. Además de un duro entrenamiento físico, fundamental para la apariencia del personaje protagonista de la serie.
‘Toy Boy’ cuenta la historia de un stripper (Jesús Mosquera) condenado a prisión por un crimen que dice no haber cometido. Una vez en la calle, tratará de probar su inocencia con la ayuda de una joven abogada interpretada por María Pedraza.
Fue tan exitosa esta primer temporada, que ya se habla, una vez que la pandemia calme, comenzar las grabaciones de una segunda, pues el final quedó abierto.