“Quiero que mi hija sepa que soy una mujer decente”, dijo Alicia Machado con lágrimas en los ojos
La venezolana Alicia Machado se conmovió hasta las lágrimas al decir qué quiere exactamente que su hija Dinora sepa de ella
Los comentarios de apoyo por parte de sus fans no se hicieron esperar. Crédito: Getty Images
La ex Miss Universo Alicia Machado ha pasado por muchas cosas en su vida. No sólo todas las humillaciones que vivió por parte del que fuese presidente de la organizacion Miss Universo, Donald Trump, actual Presidente de los Estados Unidos, por haber subido de peso sino por todos los escándalos en los que se ha visto involucrada.
Recordemos que se le relacionó sentimentalmente con Luis Miguel, también tuvo una relación con el pelotero venezolano Bob Abreu, al tiempo que participaba en un reality en España y la misma fue filmada manteniendo relaciones íntimas con un compañero del show. Sino que además, se ha especulado mucho sobre quién es el padre de su hija Dinora y hasta han dicho que es un hombre poderoso mexicano.
Pero lo cierto es que, la hermosa venezolana ha logrado siempre salir a flote y ser la mejor versión de ella para la persona más importante que tiene en su vida, su hija. Por eso, en una entrevista que ofreció para El break de las 7, la también actriz y empresaria habló de muchas facetas de su vida. Pero al preguntársele qué quería que su hija supiera de ella, dijo: “Quiero que sepa y se dé cuenta que soy una mujer decente, que tengo muchos valores, que tengo mucha convicción. Yo defiendo mucho mis ideales. Quiero que sea una muchachita que nadie la pueda venir a engatuzar o hacerla cambiar de lo que ella piensa”.
No hay duda que Alicia Machado es una mujer fuerte, trabajadora y que no le teme a los bajos de la vida, pues ella con su inteligencia y entereza ha podido criar sola a su hija, sacar a su familia adelante y además, se ha hecho paso en un mundo difícil y muy competitivo.
Aquí les dejamos las palabras que le dijo la reina de belleza a la presentadora de Univision, Alejandra Espinoza.
