La señal de peligro más grande que anuncia un consumo excesivo de alcohol, según médicos

Es bien sabido que durante la pandemia el consumo de alcohol incrementó, de hecho se cuenta con evidencia muy reciente que cada día lo comprueba con más fuerza. Tal se demuestra en este estudio, que fue realizado con el objetivo de comprobar si los comportamientos relacionados con la bebida cambiaron durante la pandemia y también se enfocaron en analizar si el estrés causado por la pandemia de Covid-19 tuvo alguna influencia.

El estudio fue realizado en adultos estadounidenses mayores de 21 años de edad. Se contó con la respuesta 832 personas, las cuales se dividieron en:84% mujeres, 85% blancos y 72% entre 26 y 49 años. Los participantes informaron haber consumido 26,8 bebidas alcohólicas en 12,2 de los últimos 30 días. Un tercio de los participantes (34,1%) informó haber bebido bastante y el 7,0% informó haber bebido en exceso. Una de las revelaciones más importantes es que los participantes que experimentaron algún tipo de estrés relacionado con COVID-19, informaron consumir más bebidas y reportaron pasar una mayor cantidad de días bebiendo. Además, el 60% informó un aumento en el consumo de alcohol, pero el 13% informó una disminución del consumo, en comparación con antes de COVID-19.

Con base en lo anterior y teniendo en cuenta las últimas pautas dietéticas de los Estados Unidos, publicadas el mes pasado por el Departamento de Agricultura y el Departamento de Salud y Servicios Humanos, se considera saludable que una mujer adulta consuma una bebida alcohólica por día y un hombre adulto dos por día. Es un hecho que un alto porcentaje de la sociedad en general está consumiendo más alcohol, ya sea por estrés, por aburrimiento, por pasar más tiempo en casa o por un mal hábito de años, es un problema de salud latente.

De hecho diversos expertos en salud han expresado su preocupación acerca de las pautas,  pues las consideran demasiado generosas para los hombres y también enfatizan en que no abordan los peligros del consumo excesivo de alcohol. Si bien para algunos las recomendaciones diarias sobre el consumo de alcohol, no son nada exageradas y de cierta manera los signos de trastorno por consumo de alcohol pueden surgir por beber demasiado; el alcohol genera dependencia, la cual es ambigua y suele variar de persona a persona.

Sin embargo un recurrente consumo de alcohol se puede manifestar de diferentes maneras, para algunos los signos de un problema pueden presentarse como falta de sueño, para otros podría ser la puntualidad en el trabajo o la falta de control. Diversos especialistas de la Clínica Mayo, señalan que los síntomas más comunes que anuncia un desorden en la ingesta de alcohol son: fuertes antojos, mucha ansiedad, sudoración, temblores, náuseas, renunciar los gustos y actividades favoritas y desarrollar una alta tolerancia. 

Lo cierto es que ciertas personas son más propensas a consumirlo en exceso y al ser altamente adictivo, la dependencia que genera es innegable. Si bien existen diversos matices en torno al consumo de alcohol y los casos suelen ir de leves a agudos, es un hecho que a largo plazo es un problema de salud que puede salirse fácilmente de control. 

Con base en ello surge la inevitable pregunta ¿Cuándo se vuelve preocupante el consumo de alcohol? Los expertos enfatizan que siempre el patrón de consumo de alcohol resulte en una significativa angustia que se da repetidamente y cuando se asocia con problemas en el funcionamiento de la vida diaria. Es muy probable que se diagnostique como un trastorno por consumo de alcohol. 

Sin embargo según las declaraciones del Dr. Doyle, psiquiatra del Hospital General de Massachusetts afiliado a Harvard y coautor del libro Almost Alcoholic. La señal más segura que anuncia al consumo de alcohol como un problema real es: cuando se si intenta dejar de consumir alcohol durante un período de tiempo y simplemente no se puede. 

Para Doyle un contundente ejercicio para determinar si existe un problema es dejar de beber durante un mes. Cuando es muy complicado, quizás sea un problema. También suele ser muy relevante pedir la opinión de las personas más cercanas: si les causa angustia, se trata de un problema importante.

Doyle también enfatiza que los problemas pueden volverse más profundos a medida que las personas envejecen y suelen beber las mismas cantidades que acostumbraban en su juventud.  Después de todo durante el proceso de envejecimiento, la capacidad del cuerpo para metabolizar el alcohol disminuye, y por lo tanto es muy importante cambiar los hábitos de bebida a la par, de lo contrario se presentarán diversas alteraciones en el funcionamiento del organismo y deterioros en órganos. 

Por último y no menos importante existen signos médicos que anuncian que el alcohol está afectando tu salud, uno de los principales es presión arterial más alta o aumentos en los conteos de enzimas hepáticas. 

La buena noticia es que hoy en día contamos con poderosas herramientas naturales y enfocadas en el estilo de vida como: la alimentación, el yoga y la meditación, que pueden ser un gran complemento para facilitar el camino. Recuerda que siempre es importante la valoración, el apoyo y el seguimiento de un especialista.