Casita María: La pandemia y los niños
Puentes de Aprendizaje es un programa del Departamento de Educación de la Ciudad de Nueva York que ayuda a los menores y sus familias con el aprendizaje híbrido—presencial y a distancia—que se implantó debido al coronavirus
Uno de los aspectos de la pandemia del Covid-19 sobre el que no se habla lo suficiente es cómo los niños, niñas y adolescentes han tenido que adaptarse al confinamiento, a las medidas de prevención y al contacto físico limitado.
“Yo he notado que los niños aprenden mucho mejor cuando tienen compañeras y compañeros a su lado”, comenta Carmen Cáceres, que dirige el programa Puentes de Aprendizaje (Learning Bridges), de Casita María, una organización comunitaria del Sur del Bronx que forma parte de nuestra Hispanic Federation.
Puentes de Aprendizaje es un programa del Departamento de Educación de la Ciudad de Nueva York que ayuda a los menores y sus familias con el aprendizaje híbrido—presencial y a distancia—que se implantó debido a la pandemia.
“En Casita María”, detalla Carmen Cáceres, “creamos un espacio seguro donde los niños pueden estudiar, hacer sus tareas y socializar los días que tienen clases remotas”.
En Casita María, los alumnos disponen de equipos para sus estudios y trabajos, y reciben de sus “líderes de grupo” ayuda con las tareas, además de realizar actividades artísticas y de enriquecimiento intelectual y cultural.
“Muchas familias del Sur del Bronx no tienen recursos para comprar computadoras, o pagar por el Internet”, explica Carmen Cáceres. “El Departamento de Educación ha entregado a muchos estudiantes tablets con conexión a Internet, pero en Casita María les proveemos también nuestras computadoras, además de útiles escolares. Por supuesto, aquí se cumplen todas las normas de los departamentos de Educación y Salud”.
La educadora coincide en que la pandemia y sus consecuencias en las relaciones de los niños y adolescente tienen un impacto profundo en su desarrollo social y emocional.
“Compruebo todos los día lo importante que es el contacto entre los niños, aunque sean solo gestos faciales, o expresiones corporales”, amplía. “Un día, solamente vino al programa una niña de su grupo, y al verse sola se puso a llorar. Estaba tan triste que tuvo que regresar a su casa. Quería estar con otros niños, pero no había otros niños. Esa experiencia me hizo comprender mejor lo que significa para los niños estar con otros que son como ellos”.
Carmen Cáceres habla con decidido optimismo sobre el futuro, cuando las cosas se normalicen y podamos volver a la vida como la conocíamos.
“Vamos a poner toda nuestra energía para que estos chicos puedan recapturar todo eso que han perdido. Pero por el momento, lo más importante es que estén bien y que estén sanos”.
Para más información sobre Casita María, visiten www.casitamaria.org.
“Y los interesados en el programa Learning Bridges o Puentes de Aprendizaje, pueden llamarme al (718) 589-2230 extensión 6204”, finaliza diciendo Carmen Cáceres.
Para más información sobre la Hispanic Federation, consulten en www.hispanicfederation.org o búsquennos en Facebook y Twitter.
¡Pónganse sus máscaras y mantengan seis pies (o dos metros) de distancia social para combatir el coronavirus!
¡Celebremos juntos el 31er aniversario de la Hispanic Federation, y hasta la columna próxima!
-Frankie Miranda es el presidente de la Hispanic Federation