Biden y el plan de enviar dinero en efectivo a Centroamérica para detener inmigración
La asesora para la frontera sur, Roberta Jacobson, indicó que se evalúa ayuda económica directa a países del Triángulo Norte
El gobierno del presidente Joe Biden está considerando seriamente enviar dinero en efectivo a Centroamérica, a fin de detener la inmigración que aumentó en los últimos meses.
Así lo habría confirmado Roberta Jacobson, asesora sobre la frontera de la Casa Blanca a Reuters, a pocos días de que la Administración Biden diera a conocer el incremento de llegada de inmigrantes a la frontera con México, con un alza de 100% de niños no acompañados y 71% de extranjeros en general.
“El programa potencial estaría dirigido a personas en la región del Triángulo Norte de Guatemala, Honduras y El Salvador”, publicó la agencia citando una entrevista con Jacobson, quien fuera embajadora de México.
No queda claro quiénes recibirían el dinero en esos países centroamericanos o cómo sería la distribución.
“Estamos analizando todas las opciones productivas para abordar tanto las razones económicas por las que la gente puede estar migrando, como las razones de protección y seguridad”, dijo Jacobson.
Jacobson fue cuidadosa en sus afirmaciones, al señalar que el dinero no será entregado directamente a los centroamericanos.
“Lo único que puedo prometerles es que el Gobierno de Estados Unidos no entregará dinero o cheques a la gente”, dijo Jacobson.
El presidente Biden ha pedido $4,000 millones de dólares en ayuda al desarrollo para Centroamérica durante cuatro años para abordar las causas económicas, principalmente, que provocan la migración.
El viernes, la Casa Blanca solicitó $861 millones de dólares al Congreso para ese esfuerzo como parte del plan anual de financiamiento del demócrata.
De ser aprobado, eso representaría un aumento de casi 40% con respecto al año fiscal en curso, cuando se destinaron $500 millones de dólares a través de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) cuyos fondos fueron menores durante el gobierno del presidente Donald Trump.
USAID aclara que algunos de sus programas, que operan desde hace varios años, destinan fondos directos a familias para enfrentar falta de alimentos y otras necesidades básicas.
Kevin McCarthy (California), el líder republicano de la Cámara de Representantes, criticó la idea de las transferencias de efectivo.
“El presidente Biden quiere tratar de comprar nuestra salida de su crisis en la frontera con el dinero de los contribuyentes”, dijo en Twitter. “La Administración está gastando $60 millones a la semana y ahora quiere lanzar un programa de transferencia en efectivo en Centroamérica. Este es un insulto a los millones de estadounidenses que están sin trabajo en nuestro país”.
President Biden wants to try and buy our way out of his border crisis with taxpayer money. The Administration is spending $60 million a week, and now wants to launch a cash transfer program in Central America. This insults millions of Americans who are out of work in our country. https://t.co/Jcav3wYyhf
— Kevin McCarthy (@SpeakerMcCarthy) April 10, 2021
Aunque USAID tiene distintos programas en gran parte del mundo, en México y Centroamérica se enfocan a seguridad y desarrollo comunitario, así como en el retorno y reintegración de inmigrantes deportados.
Por ejemplo, en 2014 a 2017, incluso durante el gobierno de Trump, la agencia ha proporcionado alrededor de $27 millones de dólares para ayudar a los repatriados.
“Esta asistencia ha incluido el suministro de alimentos, transporte, útiles escolares y ayuda para encontrar trabajo”, indica un reporte de la Oficina de Responsabilidad del Gobierno de EE.UU. (GAO).