Shaun Donovan: “Soy el único que puede sacar a Nueva York de la crisis”
El exfuncionario del gobierno Obama y de la Administración Bloomberg, hijo de padre panameño y nieto de inmigrantes, defiende ser la mejor carta a la Alcaldía por su manejo de crisis y sus buenas relaciones con gobernantes y comunidades
El próximo 22 de junio los neoyorquinos saldrán a votar en las elecciones primarias para elegir al candidato demócrata que competirá en los comicios generales de noviembre, donde se sabrá quién será el próximo alcalde de Nueva York, cuando Bill de Blasio termine su mandato.
Y dentro del amplísimo ramillete de candidatos que aspiran a conseguir la máxima jefatura de la Gran Manzana, está el exSecretario del Departamento de Vivienda y Desarrollo Urbano de la Administración Obama, Shaun Donovan, quien insiste en que es el Alcalde que Nueva York necesita para sacar a la ciudad de la crisis en que la ha sumido el COVID-19, y según reclama, la falta de liderazgo de De Blasio.
Donovan habló en entrevista con El Diario, sentado en el restaurante Hudson Smokehouse, en pleno corazón de El Bronx, sitio al que ayudó con el programa “Common Table”, una iniciativa creada en plena pandemia, que distribuye comidas de restaurantes directamente a familias pobres en asociación con organizaciones comunitarias.
Allí, el exfuncionario de la Alcaldía de Mike Bloomberg, quien es hijo y nieto de inmigrantes, y quien tiene relaciones muy cercanas con el actual presidente Joe Biden, defendió la urgencia de que los neoyorquinos elijan a un mandatario que tenga experiencia con lidiar crisis y que tenga relaciones buenas tanto con el gobierno federal como con las organizaciones de base, y advirtió que solo él cumple esos requisitos.
Donovan, de 55 años, quien habla español, y es hijo de un padre panameño que llegó a Nueva York en busca del sueño americano, se comprometió a que de llegar a ser alcalde, velará para que Nueva York sea verdaderamente una ciudad santuario, no solo que proteja a los inmigrantes de ‘la migra’, sino que les garantice oportunidades, empleo, vivienda y salud y prosperidad económica.
Usted tiene experiencia en gobierno, pero no ha sido político: ¿Por qué decidió saltar al ruedo buscando la Alcaldía de NYC
“Parte de la respuesta es mi propia historia de inmigración, que comenzó con mi abuelo y mi papá. Yo amo a esta ciudad, porque le ha dado todo a mi familia, le dio una oportunidad a mi familia que no creo que ninguna otra ciudad en el mundo nos hubiera dado. Mi abuelo fue uno de los muchos niños irlandeses que se crió al sur en Londres y se fue solo en un bote, y terminó en Valparaíso, Chile. Allí aprendió español y se ganó la vida. Y teniendo una experiencia como muchos de los que vienen aquí a Nueva York, mi papá, que nació en Panamá y creció en Costa Rica y en Lima, Perú, vino a esta país para educarse, trabajó duro y logró su sueño americano. Soy hijo y nieto de inmigrantes y también estoy compitiendo, porque de una manera, le debo todo lo que soy a la ciudad de Nueva York, pero también, porque desde niño he visto a mi ciudad en crisis. He visto el desamparo explotando en las calles, he visto el sur de El Bronx quemándose literalmente, y quiero trabajar por la ciudad que amo”.
¿Y por qué los votantes deberían darle ese trabajo a usted?
“Porque creo que soy el candidato más calificado. La persona correcta para ser el alcalde en este momento, porque entiendo lo que significa recuperar a la ciudad, calle por calle, barrio por barrio en tiempos de crisis. Soy el único que puede sacar a Nueva York de la crisis, y lo digo, primero que, por mi experiencia. Yo he liderado crisis sobre crisis en esta ciudad y en el país, de una manera que nadie lo ha hecho, y eso me hace el más calificado”.
¿Qué crisis ha manejado usted?
“Además de mi trabajo en este barrio, (el sur de El Bronx) y alrededor de la ciudad, reconstruyéndolo en los 70’y los 80′, yo fui comisionado de Vivienda después del 911, cuando la peor crisis golpeó la ciudad y le robó más de la mitad de la prosperidad de los latinos en la ciudad. Luego, el presidente Obama me pidió ser Secretario para manejar esos daños. También cuando el huracán Sandy golpeó a Nueva York, me pidió liderar todo el esfuerzo de recuperación y luego me pidió ser director de todo el presupuesto para ello, de 4 billones de dólares y logramos manejar la crisis. También semanas después cuando apareció el ébola, nos aseguramos hombro a hombro que de que esa amenaza gobal no se volviera pandemia. He liderado crisis tras crisis, y ahora, ante peor crisis que haya visto en toda mi vida, creo que nadie más puede manejarla como yo”.
¿Y cómo planea a sacar a Nueva York de la crisis actual que ha dejado el COVID?
“Lo primero es que tenemos que asegurarnos de que la Ciudad de Nueva York reciba la ayuda que merece de parte del Gobierno federal y nadie está en mejor posición que yo, por mi profunda relación con el presidente Biden con la vicepresidenta Harris y todos los líderes en el congreso”.
¿Que pueden esperar de usted como Alcalde los inmigrantes?
“Yo voy a asegurarme de que Nueva York sea de verdad una ciudad santuario. Mi papá tuvo green card por 50 años en esta ciudad. Para mí la inmigración es un tema profundo en mi propia vida, y quiero asegurarme que esta sea una ciudad santuario para los inmigrantes no solo en protecciones sino con oportunidades reales. Yo permitiré a los inmigrantes votar aquí, incluso si no tienen ciudadanía, voy a trabajar para que tengan acceso a salud. Necesitamos hacer más en educación, crear más programas en las escuelas para personas con segundo idioma, tener a más latinos profesores. Ahora solo el 45% de los maestros son de color cuando hay un 85% de niños de color en las escuelas, Quiero crear cambios reales en muchas áreas”.
¿Y cómo manejaría el NYPD y la criminalidad?
“Sé que podemos crear tanto seguridad como respeto. Tenemos que enfocarnos en ambos, porque escucho que hay preocupaciones en las comunidades. Quiero que la policía refleje a nuestras comunidades, que se cree transparencia y se responsabilice a la policía por sus acciones. Quiero que haya más entrenamiento y asegurarnos de sacar a las manzanas podridas y reducir las cosas que hace hoy la policía, como patrullar escuelas y responder a desamparados. Quitarle esas tareas y así hacer mucho mejor el trabajo, que se enfoquen en armas y crimen”.