¿Qué familias son elegibles para recibir “cheque de estímulo para niños” de hasta $375 este verano bajo “Pandemic EBT”?
Bajo el "Plan de Rescate Estadounidense" (ARPA) aprobado por el Congreso federal el mes pasado se amplió el incentivo para compra de alimentos y ahora es accesible a una mayor cantidad de estudiantes hasta los meses de verano
Imagen de archivo de un negocio en Nueva York que acepta cupones de alimentos. Crédito: Mariela Lombard | El Diario NY
La extensión en el verano del programa P-EBT aplica a todos los niños en Estados Unidos elegibles para recibir comidas gratuitas o a precio reducido durante el año escolar.
Una hoja informativa en el sitio web del Departamento de Agricultura federal (USDA), agencia que encabeza el proceso de implementación del programa, señala que la ampliación por los meses de verano beneficiará a todos los niños de todas edades que sean de bajos recursos para que no les falte un plato de comida.
“Bajo ARPA, P-EBT está disponible este verano para todos los niños elegibles para recibir comidas libres de costo o bajo precios reducidos durante el año escolar. Esto incluye los niños en escuelas que reciben beneficios de P-EBT durante el año escolar y los que son elegibles para comidas gratis o a precio reducido en las escuelas pero no recibieron beneficios bajo P-EBT en el último mes del año escolar porque asistieron a la escuela personalmente y tenían acceso a servicio de alimentos en la escuela”, lee el aviso de USDA del 26 de abril.
“También incluye a niños que fueron recientemente catalogados como elegibles para comidas gratis o a bajo costo durante el periodo de verano cubierto, así como niños de 6 años o menos que están registrados en SNAP (Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria) durante el verano”, añade la agencia.
La entrada además explica que para que la extensión alcance a la mayor cantidad de menores posibles y de manera más eficiente, USDA decidió crear una plantilla para la distribución de P-EBT en verano bajo la que se guiarán los funcionarios encargados del proceso desde los distintos estados.
“La plantilla le permite a los estados elegir un beneficio estándar determinado por USDA que alivia a los estados de la carga de determinar los propios niveles de beneficios basados en los calendarios específicos de los distritos escolares por estados”, precisa la agencia.
Mediante el programa se suministran los fondos para las comidas que el estudiante no estará recibiendo en la escuela; aproximadamente, $6.82 por menor por cada día de la semana, que se depositará en la tarjeta de débito EBT que las familias usan para comprar alimentos para un total de $375.
A las familias que ya reciben fondos de SNAP o cupones de alimentos se les acreditará el incentivo adicional en esa misma tarjeta.
P-EBT o Pandemic EBT se aprobó el año pasado como parte de la Ley Familias Primero de Respuesta al Coronavirus (Families First Coronavirus Response Act o FFCRA) para que los hogares con niños recibieran un incentivo adicional para comprar alimentos mientras estudiaban desde sus hogares. El programa expiró en septiembre, pero con la ampliación bajo la Administración Biden ahora impactará a los estudiantes incluso en los meses de verano.
Bajo el “Plan de Rescate Estadounidense” (ARPA) aprobado por el Congreso federal el mes pasado, se amplió el beneficio para hacerlo accesible a una mayor cantidad de estudiantes hasta los meses de verano.
En la sección 1101 de la primera ley aprobada para P-EBT se establece que USDA será la agencia encargada de aprobar los planes estatales para proveer ayuda de emergencia a través del programa SNAP a los hogares con niños que de otra forma recibirían comidas gratis o a precio reducido si sus escuelas no estuvieran cerradas debido a la pandemia del coronavirus. La escuela del menor deberá estar cerrada por al menos cinco días consecutivos para que el hogar sea elegible a los beneficios, según establece la ley aprobado en marzo del año pasado.
Se espera que con la extensión al programa de Transferencia Electrónica de Beneficios durante la Pandemia se impacte a más de 30 millones de estudiantes de bajos ingresos y en riesgo de caer en la pobreza.
