Chrissy Teigen se queda sin un jugoso contrato porque han expuesto crueles y feos mensajes de su pasado hacía otra mujer
Courtney Stodden ha dicho que Teigen le mandaba mensajes feos como: "Estoy deseando que te mueras"
Chrissy Teigen, conocida por ser la esposa del cantante John Legend pero también por el papel tan activo que ha venido desempeñando en los últimos años en la red social Twitter, donde comparte sin pudor sus opiniones sobre temas de actualidad y, asimismo, sus experiencias personales más íntimas, como las secuelas emocionales del aborto espontáneo que sufrió el pasado septiembre, se acaba de quedar sin un jugoso contrato que tenía preparado para ella la cadena de grandes almacenes Bloomingdale’s.
La compañía iba a contar con la también presentadora y chef ocasional como su flamante madrina para la temporada primavera-verano, hasta el punto de que la firma estaba ya ultimando los detalles de un evento promocional de grandes dimensiones que giraría fundamentalmente en torno a ella y, por supuesto, a las novedades y ofertas de la citada campaña. Sin embargo, como ha revelado el portal de noticias Page Six, Bloomingdale’s ha decidido romper unilateralmente el acuerdo esta misma semana.
“Todo estaba prácticamente organizado… Pero al final la empresa ha decidido cancelar el proyecto”, ha revelado una fuente al citado medio, perteneciente al diario The New York Post.
La razón de este sorprendente cambio de planes estriba en el escándalo en el que se ha visto envuelta la celebridad a cuenta de los mensajes denigrantes y vejatorios que, hace una década, dirigió en privado a la modelo Courtney Stodden. La maniquí, quien ahora tiene 26 años, reveló recientemente que, entre otras lindezas, Chrissy le había animado a quitarse la vida. “Chrissy no publicaba tuits ofensivos en público, pero llegó a mandarme mensajes privados para pedirme que me suicidara, en plan: ‘Estoy deseando que te mueras'”, aseguraba Courtney.
Lejos de negar la mayor, la acusada emitió posteriormente un mensaje de disculpa en el que dejaba patente su arrepentimiento ante una conducta que, señaló, era impropia de la Chrissy de hoy en día, quien curiosamente se ha venido destacando como toda una activista en contra del ciberacoso, abogando por mayores niveles de tolerancia y armonía en la siempre crispada esfera virtual.
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