Monitor Federal insiste en preocupación por grave crisis de Rikers Island, pero autoridades defienden avances
Asegura que presos están en un elevado riesgo de sufrir daños y mencionó que en 2021 ha habido 700 ataques de guardias a internos, 50 apuñalamientos, 12 muertos y 5 suicidios
Rikers Island, la cárcel más grande de la Ciudad de Nueva York, sigue recibiendo duros señalamientos y críticas ante la grave crisis de seguridad, violencia y violación de los derechos básicos que enfrentan los más de 5,600 reclusos que actualmente están privados de la libertad en ese penal.
Y en un nuevo fustigamiento, que se suma a la ya larga lista de críticas que esa prisión ha recibido en los últimos meses, el más reciente reporte del Monitor Federal, quien desde el 2014 supervisa el sistema carcelario de la Ciudad de Nueva York, mostró que internos y personal penitenciario están en un elevado riesgo constante de sufrir daños a su integridad física y mental, debido a que las condiciones en las prisiones municipales son “peligrosas” y “gravemente preocupantes”.
A través del reporte, dado a conocer el pasado jueves, el funcionario federal señaló nuevamente que el Departamento de Correccionales de la Ciudad (DOC) ha sido incompetente en liderar los penales y resolver la crisis carcelaria, y aseguró que urgen cambios sistemáticos en las prisiones al igual que medidas de los tribunales para poder resolver las “deficiencias significativas”.
“Si bien el Departamento ha tomado algunas acciones positivas y sus preocupaciones en las últimas dos semanas, dada la profundidad y dimensión de los problemas, estas acciones no han disminuido materialmente el alto riesgo de daño que prevalece en el día a día”, advirtió el informe.
Más suicidios y reclusos apuñalados
En su nuevo análisis, el representante federal manifestó con suma inquietud que en los últimos 10 meses más de 700 reclusos reportaron haber sido víctima de “uso de la fuerza” por parte del personal, al igual que se contaron más de 50 apuñalamientos y heridas con armas blancas, eso sin mencionar las faltas operativas y de seguridad. Asimismo se destacó que cinco suicidios de internos en lo que va del 2021, cifra mayor que la suma de hechos similares en los últimos cinco años, y que es una clara señal de alerta que se ha pasado por alto sobre el cuidado de los reclusos y el tratamiento a asuntos de salud mental.
Otro dato estremecedor denunciado por el Monitor Federal es el registro de 12 muertes de internos en lo que va del 2021 y un total de 51 en los últimos seis años.
Los reveladores datos surgen justo cuando desde diferentes orillas políticas y de organizaciones defensoras de los reclusos se ha exigido a la Administración De Blasio que cierre inmediatamente el penal de Rikers Island, llamado por internos como “la isla de la tortura”. Las pésimas condiciones en la prisión fueron confirmadas por varios legisladores que la han visitado en las últimas semanas.
En su informe sobre la crisis humanitaria en Rikers, el Monitor abogó por cambios urgentes, como la implementación de un plan de seguridad provisional, trabajo para frenar los ataques de internos a sí mismos y el suicidio y monitoreos de los ingresos, a través de video.
Fuertes críticas contra la Ciudad
La organización defensora de los internos, ‘Legal Aid Society’ criticó el pésimo manejo que la Ciudad sigue haciendo con las cárceles municipales y destacó que los datos del Monitor Federal son solo una confirmación más de la gestión desastrosa con que se está abordando la crisis penitenciaria.
“Los informes más recientes del Monitor y la Ciudad continúan dejando en claro la ineptitud profundamente arraigada dentro del Departamento de Correccionales de la Ciudad de Nueva York (DOC) para proteger a las personas a su cargo. El alto nivel de uso de la fuerza, los incidentes peligrosos y el colapso continuo de las funciones básicas de la cárcel son tan alarmantes como siempre”, aseguró Legal Aid, a través de un comunicado.
“Combinado con las medidas lamentablemente insuficientes que la Ciudad ha adoptado recientemente, muestran que la Ciudad simplemente no está dispuesta o no puede hacer los cambios sistémicos para responsabilizar al personal y al liderazgo por el trato humano y constitucional de nuestros clientes”, agregó.
Kenyatta Muzzanni, directora de la Organización Katal que aboga por la defensa de los reclusos, pidió a la Administración De Blasio que escuche la gravedad del reporte y tome medidas inmediatas para resolver la crisis carcelaria.
“El Monitor Federal tiene razón: Rikers Island se encuentra en un estado de emergencia total debido a las tortuosas e inhumanas condiciones en las que han muerto 12 personas solo este año. Para abordar la crisis, se necesita una respuesta a nivel del sistema para descarcelar, pero el alcalde De Blasio no ha hecho casi nada para salvar vidas y poner fin a esta crisis”, dijo la activista. “El Alcalde debe coordinar con los Fiscales de Distrito y los Tribunales para liberar a internos y devolverlos a sus comunidades. Esa es la única solución”.
DOC destaca algunas mejoras
Tras las severas preocupaciones del reporte, el Departamento de Correccionales admitió haber tenido inquietudes similares recientemente sobre la crisis denunciada, pero prefirieron destacar las mejoras que han ido mostrando en los últimos días.
“Anteriormente nos hemos hecho eco de muchas de las mismas preocupaciones del Equipo de Monitoreo. Sin embargo, en este informe, el Equipo de Monitoreo tomó nota de nuestro trabajo y progreso relacionado con los requisitos de la nueva Orden Judicial que están diseñados para abordar estas preocupaciones importantes”, manifestó una vocera del DOC.
La corte ordenó al Departamento de Correccionales varias medidas que esa agencia defiende que ya están siendo implementadas, pero que críticos aseguran no estar viendo con la celeridad que amerita, entre ellas establecer un límite obligatorio de 24 horas en el tiempo que las personas pueden permanecer en las instalaciones de admisión y asegurarse de que el personal carcelario siga estrictos protocolos de prevención del suicidio. Asimismo, informar a la corte con un plan de seguridad provisional inmediato que aborde las graves deficiencias en las prácticas básicas de seguridad en el Departamento, como el abandono del personal de sus puestos, no cerrar las puertas con llave y no supervisar a las personas bajo custodia y lanzar un proceso para permitir la contratación de líderes de instalaciones fuera de los rangos del DOC, de modo que la contratación no se limite al personal actual del DOC.
La crisis de Rikers Island en cifras:
- 700 reclusos reportaron haber sido víctima de “uso de la fuerza” del personal en lo que va del 2021.
- 50 apuñalamientos y heridas con armas blancas denunciadas.
- 5 suicidios de internos en lo que va del 2021.
- 4 suicidios se registraron en total entre el 2016 y el 2020.
- 12 muertes de internos reportadas en lo que va del 2021.
- 51 presos muertos en los últimos seis años.
- 5,542 reclusos hay actualmente en Rikers Island.
- 90% de los presos ni siquiera han visto al juez.
- 7,230 es el personal penitenciario que hay en Rikers Island.
- 2,500 en promedio llegan a faltar al trabajo cada día.
- 1,367 se reportan enfermos en promedio diario.
- 700 no acuden porque tienen restricciones médicas.
- $400,000 y más cuesta tener a cada preso en Rikers Island cada año.