Récord de tarjetas de crédito en EE.UU.: 196 millones entregadas en 2021, hasta a clientes con puntajes bajos
Los prestamistas están repartiendo más tarjetas de crédito que nunca, hasta a las personas no preferenciales, que son aquellas con un crédito pobre o justo; 196 millones de estadounidenses tenían tarjetas a finales de 2021
Los prestamistas están entregando tarjetas de crédito a diestra y siniestra a los estadounidenses que las solicitan. Crédito: Pexels | Pexels
En Estados Unidos los prestamistas están entregando más tarjetas de crédito que nunca, y una parte cada vez mayor de ellas está teniendo como destinatarios a consumidores con puntajes crediticios más bajos.
De acuerdo con un informe de TransUnion, la agencia de datos crediticios, un récord de 196 millones de estadounidenses contaban con tarjetas a fines de 2021.
Según las últimas cifras del tercer trimestre del año anterior, que es el que indica lo más reciente en cifras detalladas, la cantidad de nuevas tarjetas emitidas alcanzó un máximo histórico de 20.1 millones, y unos 9 millones de ellos fueron para los llamados prestatarios no preferenciales, que son aquellos que disponen de un crédito pobre o justo.
Los prestamistas quieren aprovechar que los consumidores están ansiosos por aprovechar que han podido cumplir con sus obligaciones después de que terminaron los programas de estímulos económicos pandémicos el año pasado.
Con campañas de marketing y promociones, los emisores de tarjetas de crédito quieren atraer clientes, aún cuando las tasas de interés que se cobran a las tarjetas estuvieron en máximos históricos el año pasado, en comparación con las tasas libres de riesgo de la deuda del Tesoro.
Con todo, los tarjetahabientes siguen siendo cautelosos con sus nuevos créditos y el saldo promedio por prestatario cambió poco con respecto al año anterior en el cuarto trimestre, a $5,127 dólares, y se mantuvo muy por debajo de los niveles previos a la pandemia, señaló TransUnion.
Se encienden los focos amarillos:
Los emisores parecen desconocer que, a menos de que los pagos de los préstamos estudiantiles se condonen o se suspendan una vez más, millones de estadounidenses tendrán que cumplir con esas obligaciones de préstamos en mayo, cuando termine el período de indulgencia.
Por lo regular los estadounidenses destinan mensualmente cientos de dólares a los pagos de préstamos estudiantiles, lo que obligará a muchos hogares a tomar decisiones presupuestarias sobre las deudas más importantes por solventar.
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