Madre de Idaho se declara culpable de asesinar a su hijastro hispano; lo privó de comida, lo golpeó con un sartén y le pedía dormir en el armario
Monique Osuna se declaró culpable de asesinato en primer grado por matar a su hijastro a través de patrón prolífico y variado de abuso
Monique Osuna aceptó un acuerdo de culpabilidad para evitar la muerte capital. Crédito: Ada County Sheriff's Office | Cortesía
En 2018 el menor de edad Emirk Osuna, de entonces 9 años, se mudó a casa de su padre, Erik Osuna Gutiérrez y su madrastra, Monique Osuna, porque su madre biológica, Sacil Siglaly Lucero, había sido privada de su libertad en una cárcel de California acusada de golpear y herir gravemente a sus hermanos mellizos.
El menor de edad llegó con la ilusión de empezar una nueva vida, cuando en realidad le esperaba un verdadero infierno; su madrasta se encargó de complicarle la vida desde el día 1 que entró a su casa, hasta el 1 de septiembre de 2020 cuando murió.
A más de un año de los hechos, Monique Osuna se declaró culpable de asesinato en primer grado por matar a su hijastro a través de patrón prolífico y variado de abuso.
De acuerdo con las autoridades, Monique Osuna, privó a Emirik de comida y agua, además, lo golpeó en reiteradas ocasiones con un cinturón, un sartén y una correa para perros, además lo obligaba a dormir al interior de un armario.
El medio de comunicación KRVB indicó que la madrastra del niño hispano lo obligaba a hacer ejercicio en sesiones que podían durar de 12 hasta 20 horas seguidas.
“Cada día diría que más de 12 horas al día, más o menos. A veces continuaba, más de 20 horas de ejercicio constante”, indicó el detective de la policía Meridian, Matthew Ferronato.
Entre los ejercicios que el menor de edad tenía que hacer resalta el de saltos de tijera, sentadillas, caminar sobre mano y hacer posiciones de tabla.
“Desafortunadamente mi disciplina hacía él se intensificó. Al darme cuenta estaba abusando de él y ese abuso lo mató”, dijo la acusada frente a un fiscal.
Matthew Ferronato también indicó que Monique se molestó porque el menor de nueve años bebió un vaso con agua que no era de él y le negó el acceso al baño cuando él se lo pidió.
Como parte del acuerdo, la madrastra admitió haber golpeado al menor de edad, esto a cambio de que los fiscales no buscaran la pena de muerte.
Se sabe que Erik Osuna Gutiérrez estaba al tanto de los castigos que su pareja ejercía sobre su hijo, sin embargo, hasta ahora los cargos contra el padre siguen pendientes.
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