A todo pedal inicia una nueva era de derechos laborales para los ‘deliveristas’ de la Gran Manzana
Entra en vigor la segunda fase del paquete legislativo que protege a más de 65,000 repartidores de comida. Ahora tendrán más control sobre las propinas, las distancias de entregas y podrán usar los baños de restaurantes
La inmigrante mexicana Ernesta Galvez, luego de seis años de pedalear por casi que cada rincón de Manhattan haciendo entregas de comida de restaurantes, desde hace un par de días tiene más razones para “echarle más ganas”. Desde el pasado viernes y luego de dos años de luchas, una nueva ley local otorga más protecciones a cerca de 65,000 de sus compañeros, en su gran mayoría hombres e hispanos, que al igual que ella, ofrecen sus servicios a empresas digitales de pedido como ‘deliveries’.
Ahora, estos trabajadores podrán elegir qué tan lejos viajarán y qué rutas tomarán. También recibirán más información sobre las entregas antes de aceptarlas. Se les pagará al menos una vez por semana. Y se les proporcionará una bolsa aislada después de seis entregas.
“Ya se empezaron a notar los cambios. Ahora podemos ver el futuro con más optimismo, pues cada día valdrá más la pena este trabajo tan duro, que lo hacemos inclusive bajo tormentas”, consideró Ernesta, de 40 años y nacida en Guerrero, y quien desde hace dos décadas levanta a sus tres hijos en la ciudad de Nueva York.
Los ‘deliveristas’ de la Gran Manzana, hasta hace muy poco, no contaban con las mínimas condiciones laborales ni humanas. Incluso, en muchos casos, se les negaba tener acceso a los baños de los restaurantes a los cuales ofrecían su servicio.
En medio de una carrera de dificultades que se agravó aún más durante la pandemia, más de 6,000 trabajadores crearon el movimiento ‘Deliveristas Unidos’, logrando el respaldo del Concejo Municipal, que el pasado septiembre aprobó un paquete legislativo que ya entró en su segunda fase.
Más control sobre propinas y distancias
En concreto esto ha significado que en principio las corporaciones propietarias de Apps de pedidos online de comida como Uber Eat, Seamless, Grudhud y Doordash debieron modificar la forma cómo se relacionaban con esta fuerza laboral. Una conquista legislativa que convierte a la ciudad de Nueva York en la primera en ofrecer protecciones esenciales a estos trabajadores.
Desde el pasado 24 de enero, las aplicaciones con licencia deben informar a los trabajadores la propina por cada entrega, el pago total y las propinas del día anterior.
Y apenas desde el pasado 22 de abril, las aplicaciones están obligadas a ofrecer opciones y facilidades a los deliveries, para evitar largas distancias de entrega, además mínimos estándares de pago, sin comisiones, por retirar su dinero y los restaurantes que trabajan con las Apps deben permitir que usen sus baños.
“Ha sido una pelea entre David y Goliat. Pero ya hemos visto cómo las aplicaciones móviles de entrega de comida modificaron sus sistemas. Ya todo está más clarito, para evitar abusos con el pago de las propinas y con las distancias”, explicó Gustavo Ajché, líder de Deliveristas Unidos.
La Ciudad a través del Departamento de Protección al Consumidor y al Trabajador (DCWP) inició una campaña para subrayar a todos estos trabajadores, que tienen nuevos derechos independientemente de su estatus migratorio, dejando claro que cualquier represalia por reclamar sus derechos, es ilegal.
“Con estas nuevas leyes de protección de los trabajadores, estamos dando un paso hacia la mejora de las condiciones laborales para trabajadores esenciales que mantienen esta ciudad en funcionamiento. Quiero recordarles a los repartidores, que están cubiertos por estas nuevas leyes por las que lucharon tanto. Somos un recurso para hacer cumplir esas protecciones”, alertó la comisionada de DCWP, Vilda Vera Mayuga.
Vienen otras rutas
Estos nuevos controles a las apps de pedido son un paso adelante, pero no es suficiente para esta fuerza laboral que se organizó en Nueva York y tiene otras ambiciones.
“Hemos avanzado mucho. Seguirán sabiendo de nosotros. Durante la pandemia fuimos esenciales para alimentar a millones de neoyorquinos que tenían temor de asomarse a la puerta. Nosotros nunca paramos. Cruzamos puentes y distancias enormes. Avanzamos en lo mínimo que se puede ofrecer a un trabajador”, aseveró Ajché.
A partir del 1 de enero del 2023, las aplicaciones también deberán pagar a los trabajadores la nueva tasa de pago mínimo que establecerá la Ciudad. Este pago no incluirá propinas.
Actualmente, DCWP está realizando un estudio sobre las condiciones de trabajo para determinar la nueva tarifa mínima.
Como parte de este esfuerzo, esta agencia de la Ciudad organizará una audiencia pública en junio para escuchar testimonios directamente de los trabajadores de entrega y otras partes interesadas.
“Echarle muchas piernas para sobrevivir”
Ante estos avances laborales, el deliverista guatemalteco ‘Javier Sánchez’, de 50 años, comparte que hace un año sentía mucho miedo de integrarse a cualquier movimiento de reclamar derechos, porque prefería “evitar problemas” por ser indocumentado.
“Antes de estas leyes uno era como un esclavo que se tenía que entender con una aplicación en un teléfono. Era realmente inhumano. Y uno lo único que quiere hacer es trabajar dignamente. No te quedaba otra. Con esas nevadas que caen, igual tú nos ves en cada esquina. Y pocos saben lo que pasamos”, describió Javier.
La mayoría de estos trabajadores acusan en varias encuestas un “modelo de explotación” que los aleja del salario mínimo legal. A la par, tienen muchas inconformidades con la forma cómo las compañías tecnológicas calculaban sus propinas y los plazos en los cuales tenían acceso a sus ganancias.
“Más que todo, durante los meses de la pandemia, muchos sitios cerraron y se duplicaron los pedidos. Y a veces tenías que ir a dos ruedas echándole piernas, millas y millas. Ahora, cambiaron la aplicación para que tu puedes también controlar eso. Hay nuevas ventajas, pero igual debes trabajar muchísimo para sobrevivir”, compartió el inmigrante centroamericano.
‘Apps’ están respetando las normas
Portavoces de las corporaciones de comida a pedido, no han mostrado hasta ahora resistencia a la secuencia de nuevas leyes que ya empezaron a cumplir.
“Estos proyectos de ley son medidas de sentido común para apoyar a los repartidores que trabajan duro todos los días para los restaurantes y los residentes de Nueva York. Asegurarse de que reciban un salario digno y tengan acceso a los baños no es solo una buena idea. Es lo correcto””, dijo en una entrevista con Yahoo Finance, Grant Klinzman vocero de Grubhub.
En un comunicado, a medios locales, Campbell Millum, vocera de DoorDash, dijo que esta compañía reconoció los “desafíos únicos” que enfrentan los trabajadores de reparto en la ciudad de Nueva York y lanzó iniciativas para mejorar la seguridad y pagar y ampliar el acceso a los baños.
En efecto, El Diario pudo confirmar que ya en la ciudad de Nueva York desde el pasado jueves los repartidores ya tenían acceso digital a los cambios en sus cuentas que les permite: decidir rangos de distancia de sus pedidos, la frecuencia de los pagos de sus propinas y otras facilidades.
¿Cuáles son las nuevas normas desde el 22 de abril?
- Permitir que los trabajadores de entrega de alimentos establezcan límites en las distancias que viajarán desde los restaurantes y qué puentes o túneles de la ciudad no están dispuestos a usar.
- Proporcionar información por adelantado a los trabajadores de entrega de alimentos sobre la ruta, el pago y las propinas.
- Pagar a los trabajadores de entrega de alimentos al menos una vez por semana.
- Ofrecer opciones de pago a los trabajadores de entrega de alimentos que son gratuitos.
- Proporcionar una bolsa de entrega aislada gratuita a un repartidor de alimentos después de seis entregas.
- Los restaurantes que usan los servicios de las Apps deben permitir que los deliveristas usen sus baños.
Conozca sus nuevos derechos:
- Los repartidores, las aplicaciones, los restaurantes y los consumidores pueden visitar nyc.gov/DeliveryApps para obtener recursos multilingües e información sobre estas nuevas reglamentaciones, incluido el aviso de derechos de los repartidores.
- Por esta vía también tendrá acceso a una lista completa de los nuevos requisitos según las leyes, los derechos y responsabilidades de los restaurantes, y la lista de verificación de solicitud de licencia de servicio de entrega de alimentos de terceros.
- Los trabajadores pueden presentar una queja sobre las aplicaciones que no brindan las divulgaciones requeridas o los restaurantes que no brindan acceso al baño. Para presentar una queja, envíe un correo electrónico a OLPS@dcwp.nyc.gov . Sea lo más específico posible sobre el problema.
- Los deliveries también pueden llamar al 311 y preguntar por “repartidor” o enviar un correo electrónico a OLPS@dcwp.nyc.gov para obtener más información.
Una carrera complicada
- 6 deliveristas perdieron la vida en diferentes situaciones mientras cumplían con sus envíos en 2021.
- 65,000 repartidores mínimo se estima que hay en Nueva York.
- 90,000 trabajaron para atender la demanda de alimentos a pedido durante los días más complicados de la pandemia.
- 85% de estas fuerza laboral se dedica solamente a esta actividad, según una reciente encuesta realizada por la Universidad de Cornell.
- $15 por hora es el salario mínimo en NY, pero muchos deliveristas ganan en promedio $7.87.
- 54% de los deliveristas han sido objeto de robos de partes de sus vehículos.
- 30% han sido despojados de sus motos eléctricas y bicicletas.
- 42% de los deliveristas manifiesta no tener confianza en los pagos de las Apps.