El tequila es una de las bebidas alcohólicas con menos calorías

El alcohol puede causar varios cambios en el cuerpo. Además de aumentar el riesgo de cáncer, afectar tu cerebro, el hígado, el sistema inmunológico y favorecer el desarrollo de enfermedades, también puede propiciar el aumento de peso.

Las bebidas alcohólicas pueden promover el aumento de peso de distintas maneras. Una de ellas es por su contenido de calorías que pueden acumularse rápidamente. Solo un par de bebidas puede añadir 500 calorías a la ingesta del día. Además, las bebidas alcohólicas tienen poco o nada de valor nutricional.

Se pueden perder de manera saludable hasta dos 2 libras por semana. Para perder 1 libra a la semana, se deben consumir 500 calorías menos al día de las que quema el cuerpo, según explican los Institutos Nacionales de Salud.

Si se está buscando mantener un peso saludable o perder peso, es recomendable cuidar la cantidad consumida de alcohol y la selección de bebidas. No todas las bebidas alcohólicas tienen el mismo contenido de calorías.

El consumo moderado de alcohol se consideran hasta dos bebidas para los hombres y hasta una bebida para las mujeres.

El tequila, destilado con bajo contenido de calorías

Los destilados como el tequila, son bebidas alcohólicas con la menor cantidad de calorías. En una bebida (1.5 onzas-45 ml) de ginebra, ron, vodka, whisky, tequila hay 97 calorías.

Las cervezas light también son de las bebidas alcohólicas con menos calorías, pueden tener 103 o menos calorías.

Si bien hay vinos con un alto contenido de calorías y las cervezas artesanales pueden llegar a tener hasta 350 calorías, las peores bebidas alcohólicas para cuidar el peso son los cocteles o bebidas mezcladas, aquellas a las que agregan jugo, tónico o jarabes.

Una piña colada (6.8 oz – 200 ml) puede llegar a contener 526 calorías; un Martini de chocolate (2.5 oz-74 ml) 418 calorías; y un ruso blanco (8 oz-235 ml) 568 calorías.

Para controlar el peso, los NIH señalan que lo mejor es combinar comer (y beber) menos con una mayor actividad física.

“En general, la ingesta de alcohol se asocia con cinturas más grandes, porque cuando bebes alcohol, el hígado quema alcohol en lugar de grasa”, dice el Dr. Michael Jensen, experto en endocrinología e investigador de obesidad de la Clínica Mayo a WebMD.

Cuando se consume alcohol, primero se quema como fuente de combustible antes de que tu cuerpo use carbohidratos o lípidos de grasas. El exceso de glucosa y lípidos terminan como tejido adiposo o grasa.

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