Tirador de una escuela de Kentucky en 1977 se le negó la libertad condicional y cumplirá cadena perpetua
La Junta de Libertad Condicional de Kentucky votó unánimemente para que Michael Carneal cumpliera su condena con cadena perpetua y sin derecho a libertad condicional tras el tiroteo perpetrado en Heath High School en 1997
Carneal vio la votación a través de la plataforma de Zoom desde el Reformatorio del Estado de Kentucky. Crédito: Dan Kitwood | Getty Images
Un hombre de Kentucky quien le quitó la vida a tres estudiantes y dejó cinco heridos en un tiroteo hace 25 años enfrentará cadena perpetua sin derecho a obtener libertad condicional, así lo decidió la Junta de Libertad Condicional de Kentucky por medio de una votación.
Michael Carneal, quien al momento del tiroteo tenía 14 años de edad y ahora tiene 39, les dijo a los integrantes de la junta que viviría con sus padres y seguiría con su tratamiento de salud mental si determinaban dejarlo en libertad.
El acusado reconoció que aún escucha voces como las que le dijeron que robara la pistola del vecino y la disparara contra los alumnos que se encontraban en el vestíbulo de Heath High School en 1997. No obstante, expresó que con terapia y medicamento ha aprendido a controlar su comportamiento.
La junta de libertad condicional votó unánimemente para negarle la liberación, luego de deliberar en privado por 30 minutos. Carneal vio la votación a través de la plataforma de Zoom desde el Reformatorio del Estado de Kentucky. Estuvo sentado en una silla mientras la presidenta de la junta, Ladeira Jones, pedía a cada miembro su voto.
Asimismo, Jones le dijo a Carneal que “debido a la gravedad de su crimen” cumpliría su cadena perpetua en la cárcel.
“Después de deliberar, Sr. Carneal, debido a la gravedad de su delito… su delito involucró un arma. Le quitaron la vida, y la gravedad nuevamente, es la decisión de la junta de libertad condicional hoy permitirle cumplir la condena el resto de su sentencia”, expresó Jones durante la llamada de Zoom.
El acusado solo dijo: “Si, señora” y se retiró rápidamente.
Varios de los sobrevivientes y familiares de las víctimas hablaron también ante el panel de la junta de libertad condicional. La mayoría manifestó sus deseos de que Carneal pasara toda su vida encarcelado. El hombre le dijo al panel que hay días en los que cree que merece morir por lo que hizo, pero otros días piensa que aún podría hacer algo bueno por el mundo.
Jones le había dicho a Carneal previamente que su “cargo número uno es mantener la seguridad pública”. Además, le notificó que su archivo enumeraba su pronóstico de salud mental como “pobre” y dice que experimenta “pensamientos paranoicos con imágenes visuales violentas”.
Anteriormente, el acusado se disculpó con las víctimas, incluyendo a toda la comunidad de Heath, a las afueras de Paducah.
En la masacre de 1997 murieron Jessica James, de 17 años, Kayce Steger, de 15, y Nicole Hadley, de 14, quien de acuerdo con Carneal era una “muy buena amiga” para él.
El entonces adolescente, era un estudiante de primer año cuando abrió fuego contra un círculo de oración antes de la escuela que se reunía en el vestíbulo todas las mañanas. En ese momento le dieron una pena máxima con posibilidad de libertad condicional tras 25 años.
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