Biden cancela la persecución y detención federales por el consumo de marihuana, pero seguirá castigo al tráfico
En un cambio de política sobre el consumo de drogas, el presidente Joe Biden cancelará la persecución y encarcelamiento federales por el consumo de marihuana, pero mantendrá castigo por el tráfico; la medida podría permitir la liberación de miles de personas
El presidente Biden reconoce la política fallida sobre el uso de marihuana. Crédito: Drew Angerer | Getty Images
El presidente Joe Biden está cancelando la persecución y arresto federales por el uso de marihuana, aunque seguirá persiguiéndose la producción y tráfico de esa droga, indicó un alto funcionario de la Casa Blanca.
Con su decisión, el presidente Biden pedirá al Departamento de Justicia revisar los casos de personas bajo custodia federal solamente por posesión y/o consumo de marihuana, pero que no implique tráfico. Se revisará caso por caso.
Esto podría beneficiar a unas 6,500 personas, indicó una funcionaria federal. Son casos registrados de 1990 a 2001. También se indicó que una vez firmadas las órdenes, los nuevos casos deberán ser revisados bajo dicha premisa, es decir, no perseguir a una persona por posesión simple de marihuana.
“El presidente […] está tomando medidas para poner fin a nuestro enfoque fallido hacia la marihuana”, dijo en conferencia de última hora un funcionario de la Administración Biden. “Como ha dicho a menudo, nadie debería estar en la cárcel solo por el uso o la posesión de marihuana”.
El funcionario agregó que la persecución por el uso de marihuana impacta principalmente a personas de color, entre quienes se incluye a latinos y personas de raza negra.
“Este indulto se aplica también a todas las personas condenadas por posesión simple de marihuana según la Ley del Distrito de Columbia”, se indicó. “Hay miles de personas con condenas federales previas por posesión de marihuana a las que se les puede negar vivienda, empleo u oportunidades educativas”.
El presidente hará el anuncio oficial esta tarde con la firma de órdenes ejecutivas que perfilarán la nueva política federal sobre el consumo de marihuana.
“Los miembros del Congreso han estado trabajando en este tema con un importante proyecto de ley aprobado por la Cámara, pero ese esfuerzo se ha estancado y estamos casi al final de este Congreso”, indicó sobre la decisión.
Esta decisión no afecta a los estados, ya que cada uno mantiene su derecho sobre la legislación local, pero la Administración Biden pedirá que se apeguen a las nuevas medidas, aunque no estarían forzados a ello.
Una nueva clasificación
También se ordenará a la Secretaría de Salud y Servicios Humanos (HHS), a cargo de Xavier Becerra, que revise la clasificación de la marihuana, para diferenciar su aproximación como droga “dura”, en comparación con la cocaína y la heroína y las metanfetaminas, entre otras.
“La ley federal actualmente clasifica la marihuana [en] la misma lista que la heroína y el LSD. Y es incluso más alta que la clasificación de fentanilo y metanfetamina, las drogas que están impulsando nuestra epidemia de sobredosis”, indicó el funcionario.
Se insistió en que aunque cambien las reglas sobre el consumo, la Administración Biden sugiere que se mantengan limitaciones contra el tráfico, la comercialización y las ventas a menores.
La reclasificación será basada en evidencia científica, se indicó.
