Presidente del Supremo de Paraguay abandona indefinidamente el cargo tras denuncia por corrupción
La Corte Suprema de Justicia de Paraguay (CSJ) concedió este lunes un permiso "por tiempo indeterminado" a su presidente, Antonio Fretes, después de conocerse que su hijo firmó un contrato para representar a un ciudadano brasileño de origen libanés en busca de una "salida jurídica" a su extradición a EE.UU.
La Corte Suprema de Justicia de Paraguay (CSJ) concedió este lunes un permiso “por tiempo indeterminado” a su presidente, Antonio Fretes, después de conocerse que su hijo firmó un contrato para representar a un ciudadano brasileño de origen libanés en busca de una “salida jurídica” a su extradición a EE.UU.
La decisión fue adoptada en una sesión extraordinaria de la Corte Suprema, que tenía como punto único el tratamiento de una comunicación enviada por Fretes el pasado viernes, en la que solicitaba el permiso para “abocarse a la atención de cuestiones personales”, entre ellas, la de su salud, un asunto que consideró “largamente postergado”.
El pedido fue aceptado de forma unánime por los ocho ministros del Supremo, que propusieron que el vicepresidente primero, Alberto Joaquín Martínez, asuma en reemplazo del titular de ese poder.
El presidente de la CSJ quedó en medio de la tormenta política que se desató después de que el diario ABC difundiera el pasado jueves las imágenes de un “Contrato de prestación de servicios profesionales de abogado” que el hijo del funcionario, Amílcar Fretes, firmó en septiembre del año pasado con Sharif Kassem Hijazi.
El acuerdo, que el involucrado aseguró quedó sin efecto 30 días después y estipulaba un pago de $368,000 dólares por honorarios profesionales, se hizo a nombre de Kassem Mohamad Hijazi, detenido en agosto de 2021 en un operativo liderado por el fiscal antimafia Marcelo Pecci, asesinado en mayo pasado.
Hijazi fue extraditado a EE.UU. en julio pasado.
Amílcar Fretes, quien confirmó la existencia del contrato el mismo jueves, renunció a su puesto en la hidroeléctrica de Itaipú, que manejan Paraguay y Brasil, la cual fue aceptada de inmediato.
Ese mismo día, en un comunicado, el presidente de la CSJ declaró “explícita y enfáticamente que no tiene vinculación alguna” con lo expresado en publicaciones periodísticas que lo mencionan.
“En varias ocasiones ha manifestado y enfatizado públicamente su total desautorización a cualquier persona que invoque su nombre con intenciones de eludir sus responsabilidades ante la Justicia”, zanjó en su declaración.
Poco antes de la reunión del Supremo, el exsenador Marcelo Duarte, acompañado por diputados del opositor Partido Patria Querida (PPQ), presentó una solicitud para que la Cámara de Diputados se reúna “cuanto antes” en una sesión extraordinaria, para “iniciar el procedimiento de Juicio Político” contra el ministro Antonio Fretes, según lo previsto en la Constitución Nacional.
Ya el viernes el presidente de Paraguay, Mario Abdo Benítez, había indicado que Fretes “debería pensar en renunciar al cargo”, aunque admitió que el padre no siempre debe ser responsable de lo que haga su hijo mayor de edad.
En ese contexto, el mandatario se inclinó por analizar “si se generó un tráfico de influencia directa”.
De ser así, apuntó, “categóricamente, el ministro Fretes tiene que renunciar o ser enjuiciado políticamente”.