Síndrome de la persona rígida: síntomas y tratamientos de la enfermedad que padece Celine Dion
Celine Dion reveló que padece una extraña enfermedad neurológica, conocida como SPS por sus siglas en inglés. Te contamos qué es el síndrome de la persona rígida, sus síntomas, causas y tratamientos
Aunque desde hacía ya mucho tiempo se venía especulando sobre su salud, finalmente la cantante Celine Dion rompió el silencio al publicar este jueves un video en sus redes sociales mediante el cual, la canadiense dio a conocer que padece una extraña enfermedad neurológica que le impide realizar los conciertos y giras que tenía ya programadas en los siguientes meses.
En el video, Celine Dion explicó que recientemente fue diagnosticada con Síndrome de la persona rígida (SPR), el cual según diversas estadísticas, afecta únicamente a 1 persona entre 1 millón, mismo que le ha provocado diversos espasmos.
La intérprete del famoso tema de la película de “Titanic” indicó que con el apoyo de sus hijos y médicos han podido frenar el avance de esta enfermedad cuya progresión es inevitable y que ha impactado severamente en aspectos de su vida diaria, afectando lo que más ama en este mundo: cantar.
Síndrome de la persona rígida: qué es y cuáles son sus síntomas
De acuerdo a información divulgada por los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés), el SPR es un mal raro y poco común, del cual se sabe aún muy poco.
Científicos que lo han venido estudiando desde hace tiempo consideran que se trata de una enfermedad autoinmune, es decir, que el sistema inmune de la persona es el que “ataca” al propio sistema nervioso central del paciente, conformado por el cerebro y la médula espinal.
Generalmente, el síndrome de la persona rígida se detecta mediante un análisis de sangre, con el cual se miden los niveles de descarboxilasa de ácido glutámico (GAD), los cuales suelen ser elevados cuando existe este padecimiento.
Quienes son diagnosticados con dicho padecimiento pueden presentar episodios de rigidez muscular en el tronco y extremidades; generalmente son personas que oscilan entre los 30 y 60 años.
Dentro de sus síntomas destacan: tener posturas anormales, como tendencia a encorvarse, momentos de rigidez muscular, así como espasmos, los cuales derivan a que existe un aumento de sensibilidad en temas como el ruido y el tacto y por lo tanto, el organismo genera ante dichos estímulos una respuesta de sobresalto.
También, las personas pueden caerse frecuentemente a causa de los espasmos y la rigidez muscular. Eventualmente podrían sufrir epilepsia o incluso, parálisis cerebral.
Según el NIH, su tratamiento puede incluir dosis altas de benzodiacepinas, diazepam, baclofeno o inmunoglobulina intravenosa, además de trabajo de rehabilitación.
Dada la propia naturaleza de la enfermedad, hay pacientes que pueden llegar a desarrollar depresión y ansiedad, no solo por las molestias físicas sino porque también hay niveles bajos de los neurotransmisores.
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