Oso en Colorado roba cámara fotográfica y se hace más de 400 selfies
Personal de Espacios Abiertos y Parques de Montaña (OSMP, por sus siglas en inglés) de la ciudad de Boulder, en Colorado, quedó sorprendida al ver la naturalidad con la que este oso posó, involuntariamente, ante la cámara
El oso pareciera que sabía que la cámara lo retrataba en sus distintas poses. Crédito: Janko Ferlic | Pexels
A diario, en los distintos parajes naturales que existen en el mundo, decenas de animales los cruzan a diario para buscar qué comer o un sitio en donde puedan refugiarse o tomar largos días. Para los seres humanos, no es sencillo presenciar este hecho, por lo que quienes se dedican a estudiarlos suelen hacerlo con ayuda de cámaras de observación que ponen en su camino, las cuales dan información acerca de sus movimientos o sus hábitos.
Dichas cámaras las utiliza el personal de Espacios Abiertos y Parques de Montaña (OSMP, por sus siglas en inglés) de la ciudad de Boulder, en Colorado, en donde dan seguimiento a la fauna silvestre del lugar mediante un sistema constituido por 9 cámaras de detección de movimiento que logra capturar fotografías y videos; sin embargo, pareciera ser que un animal ha descubierto el “truco” e incluso le ha gustado tanto que ha aprovechado el tiempo para hacerse un montón de selfies.
Resulta ser que un oso se percató de la presencia de una de las cámaras colocadas en medio de su trayecto y decidió pararse frente a ella un largo rato a tal grado que el dispositivo capturó alrededor de 580 fotos el pasado mes de noviembre y unas 400 era de este curioso animal al cual se la ha apodado como “Selfie Bear”.
“Las cámaras de detección de movimiento nos brindan una oportunidad única de aprender más sobre cómo las especies locales usan el paisaje que nos rodea mientras minimizamos nuestra presencia en hábitats sensibles”, indicó Will Keeley, ecólogo senior de vida silvestre de Open Space and Mountain Parks.
“La información que recopilamos de ellos se utiliza para recomendar medidas de protección del hábitat para ayudar a proteger las áreas naturales sensibles”, agregó Keeley.
Generalmente, las cámaras pasan completamente desapercibidas para estos animales, ya que generalmente se activan cuando alguno se para frente a estas. Cuando esto ocurre, las cámaras toman una foto fija. De hecho, las cámaras usan luz infrarroja para generar imágenes que minimizan las perturbaciones de la vida silvestre nocturna.
Los animales suelen suelen ser reacios a estas cámaras. Por eso, el personal de estos parques coloca sus cámaras en corredores donde es probable que pasen animales, como los pasos subterráneos de las carreteras. El departamento también coloca cámaras en áreas donde hay signos de actividad de la vida silvestre, como huellas en la nieve o senderos de caza que cruzan las cercas.
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