Los propietarios de una famosa granja de Florida fueron brutalmente atacados por su hijo
Travis Grafe, quien es considerado un incapacitado mental, estuvo cerca de asesinar a sus padres con una linterna y ahora podría terminar el resto de sus días en un hospital psiquiátrico
Rachel Knaus Grafe presenta graves lesiones ocasionadas por su hijo Travis quien le exigía la entrega de una cantidad de dinero. Crédito: JOSEPH PREZIOSO | AFP / Getty Images
Las autoridades del condado Miami-Dade dieron a conocer la detención de Travis Grafe, de 40 años, acusado de haber agredido brutalmente a sus padres Rachel y Herbert, propietarios de la popular finca Knaus Berry Farm ubicada en Homestead, al sur de Miami.
De acuerdo con el canal de televisión CBS Miami, el sujeto empleó una linterna para golpear arteramente a sus padres después de exigirles que le entregaran una suma de dinero.
Debido al escándalo generado, algunos empleados de la familia Grafe solicitaron el apoyo de las autoridades para someter al agresor, quien se dio a la fuga en un carrito de golf, pero al llegar a la casa de un vecino fue detenido por la policía sin oponer resistencia.
Resultado de la cruel agresión sufrida, Rachel Knaus Grafe presentaba graves lesiones que la obligaron a ser aerotransportada al Hospital Jackson Memorial South.
En tanto, Travis Grafe fue llevado a una cárcel local donde se le acusa de intento de asesinato premeditado de dos mayores de 65 años, agresión agravada e intento de robo a mano armada.
Sin embargo, el detenido es considerado un enfermo mental debido a que hace 20 años sufrió un accidente automovilístico que le provocó varios daños cerebrales.
Cabe señalar que en 2013, el individuo ya había sido arrestado acusado de robo y posesión de una bomba molotov. No obstante, logró ser liberado dos años más tarde a solicitud de su madre, quien recibió de un juez su custodia bajo el argumento de que estaba totalmente incapacitado debido al padecimiento de una lesión cerebral traumática.
De esta manera, Travis volverá a ser juzgado, pero ahora más severamente, pues aunque su madre reporta cierta mejoría de salud, es claro que ya no está capacitada para hacerse cargo de un violento sujeto de 40 años.
Bajo este planteamiento, el futuro heredero del Knaus Berry Farm podría pasar el resto de su vida bajo supervisión médica en un hospital especializado en casos como el suyo, pues otra opción sería mantenerlo encarcelado en una prisión de mediana seguridad.
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