Nuevo escándalo sexual en comisaría policial: oficial hispana en Texas habría intercambiado mensajes sexuales con al menos siete agentes
El esposo de Krystle Pérez, de 38 años, alertó a los supervisores de la mujer de los alegados intercambios prohibidos con colegas
Una oficial de policía en San Antonio, Texas, encargada de despachar las llamadas de emergencia al sistema 911 a agentes, se encuentra bajo licencia administrativa sin sueldo, por supuestamente “sextear” con uniformados.
La hispana Krystle Pérez, de 38 años, aparentemente lideró el patrón de mensajes de índole sexual en el que intercambió comunicaciones con al menos siete policías.
Fue su esposo Giancarlo Pérez el que descubrió el contenido erótico en su teléfono y alertó a superiores, de acuerdo con el reporte la semana pasada de medios locales como KABB y News 4 San Antonio.
Por los intercambios, Pérez, el sargento Renaldo Salinas y el subdirector Juan Leal de la Oficina del Alguacil del Condado Bexar podrían ser despedidos. Los tres fueron suspendidos hasta que se culmine la pesquisa interna que inició en diciembre pasado.
“Ella era el amor de mi vida y yo estaba muy perturbado y con el corazón destrozado. Yo estaba en negación”, dijo Giancarlo citado por News 4. El hombre descubrió los textos entre su esposa y seis oficiales de la oficina así como uno en la ciudad de Converse.
“Ellos usaron ’emojis’ para referirse a partes del cuerpo. Ellos hablaban de besarse, manosearse y estas conexiones sexuales”, describió el esposo.
Giancarlo y la esposa de otro de los oficiales llevaron las pruebas a la oficina de asuntos internos del departamento.
El alguacil Javier Salazar indicó que los empleados negaron haber mantenido relaciones sexuales o cometido actos impropios durante horario laboral. Las autoridades investigan este detalle.
En un mensaje a eso de las 10:20 p.m. de un viernes, Salinas le envió a Pérez: “Yo termino a medianoche, ven temprano”.
No está claro si Giancarlo presentó la demanda de divorcio contra Pérez.
Jessica Jarvis está en el proceso de divorcio del investigador Jason Jarvis, al que se le impuso una suspensión de 30 días como resultado de las indagatorias.
“Estas son personas que se supone que nos protejan, nos sirvan y se aseguren que la comunidad está segura”, declaró la mujer a la televisora.
También en diciembre, trascendieron los resultados de una pesquisa en el Departamento de Policía de LaVergne en Tennessee que revelaron que la exagente Maegan Hall, supuestamente mantuvo encuentros sexuales con varios colegas de la comisaría.
Al menos cinco oficiales aparte de Hall han sido despedidos de la comisaría y tres suspendidos luego de que se destapara el escándalo a raíz de una investigación interna que inició a pedido del alcalde Jason Cole.
Hall presentó una demanda en un tribunal de Nashville en la que alega que fue acosada y explotada sexualmente por los agentes que supuestamente no aceptaban un no por respuesta.
“Cuando la Sra. Hall buscó modelos a seguir en su nuevo trabajo, en su lugar encontró depredadores“, plantea la demanda presentada ante la Corte para el Distrito Medio de Tennessee hace poco más de un mes.
“En lugar de ofrecer desarrollo profesional, sus supervisores y el jefe de policía la acosaron para explotación sexual“, añade el recurso legal. “Ellos se confabularon para usar su autoridad para sistemáticamente desarmar su resistencia y atraparla en relaciones sexuales abusivas y degradantes, incluso compartiendo claves de las mejores maneras de manipularla y explotarla”, argumenta Hall y su defensa en el documento.
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