“Roommate” de presunto pandillero de la MS-13 en Florida que desmembró a chofer de Uber en medio de “delivery” salió huyendo de la escena
El habitante y su esposa sabían que algo no estaba bien al detectar sangre en el suelo de la casa y escuchar un fuerte ruido que salía del cuarto del sospechoso en medio de la noche, por lo que decidieron empacar sus cosas y mudarse a un hotel
Oscar Solís supuestamente tiene vínculos con la pandilla MS-13 en Indiana. Crédito: Oficina del Alguacil del condado Pasco | Cortesía
El “roommate” del hispano acusado en Florida de desmembrar al chofer de Uber Eats en medio de un “delivery” a su casa salió despavorido del espacio con su familia luego de detectar sangre en la sala y un ruido fuerte en medio de la noche.
La víctima, identificada como Randall Cooke, de 59 años, acudió a la residencia en Moog Road, Holiday, que compartía Oscar Solís, de 30, a eso de las 7 p.m. del 19 de abril.
Luego de esa parada, desapareció. La esposa de Cooke entró en pánico y llamó la Policía.
Documentos judiciales del caso que cita Fox News esta semana indican que el sospechoso, al que se le vincula con la pandilla MS-13, arrastró a la víctima hasta el interior de la casa, lo asesinó y luego lo picó en pedazos sin ninguna razón aparente.
El “roommate” cumplía con las labores de su segundo trabajo la noche del asesinato y se llevó a su esposa y a su hija de 6 años con él. Cuando regresaron a la casa, antes de la medianoche, notaron que la puerta de la entrada principal estaba cerrada desde el interior. El hombre consiguió una llave escondida con la que abrió una puerta de garaje lateral.
El habitante intentaba ver televisión desde su cuarto, pero el internet no estaba funcionado, así que se movió a la sala a restablecer el “router”. En ese momento, notó una sustancia roja en el suelo.
Debido a la oscuridad, no percibió que la sangre se extendía a la mesa de la cocina, el sofá y el centro de entretenimiento.
La pareja indicó a la Policía de que a eso de los 2:15 a.m., se despertaron por un ruido fuerte proveniente de la habitación de Solís.
La familia sabía que algo no estaba bien y decidieron empacar sus cosas y mudarse a un hotel. Los residentes abandonaron la vivienda a eso de las 8 a.m.
En entrevista con el referido medio, Melany Dzoba, hijastra de Cooke, lo describió como el hombre perfecto que nunca le deseaba mal a nadie, y lo más cercano que tuvo a una figura paterna.
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