Líderes de NYC logran un acuerdo sobre cómo se invertirá el presupuesto de 2024 con la marca de la crisis migratoria

Este jueves el alcalde Eric Adams y los líderes del Concejo Municipal anunciaron un acuerdo presupuestario que despeja parte de las dudas sobre cómo se invertirán los $107 mil millones que se proyecta recibirán las arcas de la Ciudad de Nueva York el próximo año fiscal. El monto más alto manejado por la Gran Manzana en su historia.

En resumen: No habrá reducciones de fondos ni para las bibliotecas, ni para servicios sociales a los ancianos, ni para el programa municipal de preescolares, ni tampoco para la Universidad de la Ciudad de Nueva York (CUNY).

Específicamente, se contemplan $7 millones para restaurar el financiamiento a los programas alimenticios de los adultos mayores.

En este anuncio, también se dejó claro que no habrá tijeretazos de dinero para el sistema de escuelas públicas, independientemente de las posibles disminuciones de las matrículas escolares.

Tampoco se tocará un centavo de los recursos de agencias municipales como el Departamento de Servicios Sociales (DSS) en donde se administran programas vitales como los cupones SNAP y los refugios temporales por emergencia.

En el largo listado de partidas de programas sociales, se subraya que más neoyorquinos con ingresos por debajo del 200% del nivel de pobreza federal, podrán aplicar a las MetroCards a mitad de precio.

Fondos para una crisis humanitaria

Este acuerdo se alcanzó luego de agrias negociaciones y grandes diferencias entre el Concejo y el mandatario municipal, quien había propuesto recortes para compensar los exorbitantes gastos que implica la atención a los solicitantes de asilo. Así como los nuevos contratos laborales con los empleados municipales.

“Llegamos a un acuerdo por un plan de gastos responsable fiscalmente, pero que tiene como prioridad proteger a los más vulnerables. Vamos a invertir para que nuestras comunidades crezcan en estos tiempos difíciles”, destacó el Alcalde.

El nuevo plan de gastos e inversiones de la Ciudad incluirá $4 mil millones en fondos para viviendas asequibles, en un momento en el se enfrenta una crisis migratoria que ha impuesto que la municipalidad, por mandato legal, financie el hospedaje y alimentación a miles de solicitantes de asilo que desde la primavera de 2022 empezaron a llegar a la Gran Manzana enviados en autobuses desde Texas.

Esta partida de gastos significa un incremento de 100% en financiamiento de capital para planes habitacionales, en medio de la crisis de vivienda, desamparados y refugiados más cruenta que registra la ciudad desde tiempos de la Gran Depresión.

Millones para crisis migratoria

Adams confirmó que hasta este jueves, se han acogido a 81,000 personas de las cuales 50,000 se encuentran en refugios y hoteles financiados por la municipalidad.

Sobre lo que significa específicamente esta crisis humanitaria en la estructura de gastos de la Alcaldía, el mandatario municipal precisó que hay una previsión de $1,4 mil millones para brindar en los próximos meses refugio, alimentos, ropa y otros servicios a los inmigrantes recién llegados, en su mayoría provenientes de países latinoamericanos y caribeños.

“Es el primer presupuesto en la historia de nuestra ciudad que se ha logrado con el consenso y el protagonismo de una mayoría legislativa de mujeres de color. Simplemente pensamos en las mujeres de cada vecindario, como una fórmula para multiplicar la prosperidad a nuestras familias”, razonó Adrianne Adams, presidenta del Concejo Municipal.

La líder de la cámara municipal puso en claro que se evitaron los recortes planteados en el plan original del Alcalde en educación inicial. Además se restauraron los recursos financieros para los tres sistemas de bibliotecas públicas y se revirtieron las reducciones al Programa de Preparación de Unidades Vacantes de la Autoridad de Vivienda de la Ciudad de Nueva York (NYCHA)

El Contralor: “Un enfoque miope”

Apenas se conoció sobre el acuerdo, el Contralor de la Ciudad de Nueva York, Brad Lander cuestionó algunos recortes que calificó como “miopes”, como los programas de justicia restaurativa en la cárcel de Rikers Island que a su juicio socavarán los objetivos de seguridad pública. 

Con base al análisis del contralor, sí se hicieron ciertos recortes y no se tomaron previsiones para servicios vitales para los neoyorquinos a pesar que para el año fiscal 2024 se esperan ingresos extraordinarios.

Lander también criticó que no se asignaron más fondos para la asistencia legal a los solicitantes de asilo.

“La Administración municipal esgrime el alto costo de brindar refugio a los inmigrantes como justificación para apretarse el cinturón. Pero no proporcionó fondos significativos para abogados pro bono que reducirían los costos a largo plazo de la Ciudad”.

La lógica del contralor es que si se ayuda a acelerar los permisos de trabajo y ajustar el estatus migratorio de los recién llegados, podrán lograr más rápidamente su independencia financiera.

En los proximos días este funcionario expondrá en detalle lo que considera los “vacíos” de este acuerdo.

Defensor del Pueblo: “No es suficiente”

Por su parte, en líneas generales el Defensor del Pueblo, Jumaane Williams valoró que no se hayan concretados recortes a servicios fundamentales como las escuelas públicas y otros programas sociales, pero también cuestionó que se haya preferido en muchos puntos la “austeridad”, antes de la necesidad de disponer de más dinero para inversiones dirigidas a los más vulnerables.

“El aumento de los fondos para tarifas justas del Subway está en este presupuesto, pero no se acerca a lo que se necesita. Asegurar los fondos para viviendas asequibles es una victoria, pero tiene como telón de fondo una legislación de veto que limitaría a que muchos neoyorquinos accedan a esas viviendas”, compartió Williams en un comunicado.

Tres puntos clave:

• $20 millones en fondos de referencia para el programa de financiamientos de MetroCards.
• $4 mil millones anuales para viviendas asequibles,
• $32 millones que ayudarán en la renovación de unidades vacantes de NYCHA