Comidas que pueden afectar la salud mental, según un especialista
Un experto de Harvard explica cómo el consumo de alimentos ultraprocesados influye en la salud mental debido a los efectos en el cerebro
La forma en que nos alimentamos puede estar estrechamente relacionada con el bienestar mental, pues el consumo de alimentos ultraprocesados afecta los neurotransmisores, lo que a su vez lleva a alteraciones en los estados mentales.
El doctor graduado en Harvard y especialista en medicina funcional, Carlos Jaramillo, en una charla en su canal de YouTube, explica que una dieta crónicamente inflamatoria podría desencadenar una inflamación neuronal duradera, “haciendo que la barrera hematoencefálica sea más permeable, y afectando los neurotransmisores, lo que lleva a alteraciones en los estados mentales”.
El especialista indica que la depresión está en aumento, y es cada vez más común que los profesionales de la salud mental se encuentren con pacientes con condiciones asociadas a pensamientos negativos.
Señala que la salud del cerebro se ve afectada por la desnutrición, o una deficiencia en nutrientes y vitaminas vitales, como la B12, el magnesio y el folato.
Esto se debe a que estos son “componentes esenciales que nuestro cerebro requiere para funcionar de manera óptima”.
La deficiencia de estos nutrientes influye en “cambios significativos en nuestro estado de ánimo y en nuestra salud mental en general”.
Factores que influyen en la salud mental
El especialista graduado en Harvard que revela que el estrés crónico y el uso continuo de antibióticos o antiácidos pueden crear desequilibrios en la microbiota, complicando aún más la relación intrincada entre la dieta y la salud mental.
“Nuestra microbiota desempeña un papel significativo en nuestro bienestar. Una perturbación en el equilibrio del intestino, considerado nuestro segundo cerebro, puede llevar a una mayor permeabilidad intestinal”, dice.
Sostiene que el intestino es responsable de neurotransmisores como la serotonina, “cualquier alteración en su equilibrio podría llevar a cambios de humor e incluso a la depresión”.
Una buena alimentación para prevenir la depresión
Advierte que los hábitos alimenticios contribuyen al bienestar mental. Dentro de las malas prácticas menciona picar continuamente durante el día, que puede llevar a problemas con la insulina y hormonas como la leptina y la grelina.
La ansiedad impulsa a desear alimentos poco saludables como dulces y carbohidratos procesados, esto a su vez puede provocar sentimientos de culpa que afectan el equilibrio emocional.
Se trata de desequilibrios que pueden provocar conductas alimenticias relacionadas con la ansiedad que afecta negativamente tanto la salud mental como la física, indica un estudio de la National Library Of Medicine.
El consumo de alimentos procesados ricos en azúcares y grasa activan el exceso de dopamina. Esto ocurre a través un sistema de recompensa que ocurre en el cerebro.
Jaramillo sostiene que algunas personas pueden llegar a perder el contacto genuino con la comida, generado que en lugar de una relación positiva con lo que nos nutre, se convierta en una fuente de angustia.
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