Cambio de hora en Estados Unidos: ¿cuándo hay que retrasar los relojes?
El horario de verano llega a su fin para darle paso al de invierno. ¿Qué pasa con nuestros dispositivos móviles?
El cambio de hora en los Estados Unidos es casi una realidad y este domingo 5 de noviembre habrá que ajustar nuestros relojes digitales, analógicos y los dispositivos electrónicos. El horario de verano está llegando a su fin.
Aunque recientemente parecía que el verano se rehusaba a partir, el colorido otoñal y la reducción de las horas de luz diurna señalan que es tiempo de hacer el cambio horario en casi todos los estados de los EE.UU.
Este sistema de horario de verano, que se inicia el segundo domingo de marzo y concluye el primer domingo de noviembre, es una práctica ya habitual. Se acerca el horario de invierno a los Estados Unidos.
¿Cuándo es el cambio de hora en los Estados Unidos?
Al llegar las 2 de la madrugada del 5 de noviembre, los relojes deben atrasarse una hora.
Si bien la mayoría de los dispositivos electrónicos ajustan la hora automáticamente, podría ser prudente marcar esta fecha en el calendario para evitar inconvenientes.
El sábado 4 de noviembre, el sol se ocultará en Nueva York a las 5:49 p.m., pero tras el ajuste horario, el 5 de noviembre el atardecer se anticipará a las 4:47 p.m.
La duración del día continuará disminuyendo hasta el 21 de diciembre, día del solsticio de invierno, para luego iniciar un incremento gradual hacia el solsticio de verano del 20 de junio de 2024.
¿Cuándo se impusieron el horario de verano y de invierno en Estados Unidos?
Este patrón de horario de verano fue estandarizado en los Estados Unidos a partir de la Ley de Horario Uniforme de 1966, aunque existen excepciones como Arizona, Hawái y algunos territorios de ultramar como Guam, Puerto Rico y las Islas Vírgenes de los Estados Unidos que no lo adoptan.
El concepto fue introducido inicialmente en los Estados Unidos por Benjamin Franklin en 1784, a través de su humorístico “Un proyecto económico”, que proponía una legislación para incentivar a las personas a levantarse con el sol y así economizar en el uso de velas.