Dentista de Florida es declarado culpable de pagar a un sicario para matar al exesposo de su hermana

Un dentista de Fort Lauderdale, fue condenado el lunes por un jurado por el asesinato en 2014 de su excuñado, Dan Markel, un renombrado profesor de derecho de la Universidad Estatal de Florida.

El sujeto identificado como Charles Adelson fue declarado culpable de asesinato en primer grado, conspiración para cometer asesinato en primer grado y solicitud de asesinato en primer grado, de acuerdo con la Fiscalía Federal para el Distrito Norte de Florida.

Adelson fue acusado de orquestar un complot de asesinato por encargo para eliminar a Markel, con quien su hermana Wendi, también profesora de derecho en la misma universidad, estaba en medio de una batalla por la custodia de sus dos hijos.

Wendi Adelson quería mudarse al sur de Florida para estar más cerca de su familia, pero Markel se negó a dar su consentimiento, argumentando que no podía trasladar a los niños a Miami.

Según los fiscales, Adelson usó a su novia en ese momento, Katherine Magbanua, para contratar a dos sicarios identificados como Luis Rivera y Sigfredo García, este último, padre de los dos hijos de Magbanua, para que mataran a Markel.

Rivera, presuntamente miembro de la pandilla Latin Kings, se declaró culpable de asesinato en segundo grado como parte de un acuerdo de culpabilidad y fue condenado a 19 años de prisión en 2016 a cambio de su cooperación en el caso contra Adelson.

Entretanto, García fue condenado a cadena perpetua en 2019 por el asesinato de Markel. Magbanua fue declarada culpable de su papel en el complot en 2022 y condenada a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

Según los testimonios, Rivera y García condujeron desde Miami hasta Tallahassee y siguieron a Markel hasta su casa el 18 de julio de 2014. García le disparó dos veces en la cabeza a Markel mientras estaba sentado en su automóvil en el garaje de su casa y murió horas después de ser trasladado a un hospital.

Adelson negó tener alguna participación en el complot y testificó en su propia defensa que fue víctima de una “doble extorsión” por parte de los verdaderos asesinos, que le exigieron dinero a través de Magbanua la noche del asesinato, y de un agente del FBI que se hizo pasar por un chantajista.

Adelson y su abogado dijeron que los comentarios que hizo en las grabaciones telefónicas y otras llamadas grabadas eran sobre la extorsión, no sobre el asesinato.

Una audiencia de sentencia está programada para el 8 de febrero. Adelson está detenido sin fianza. El cargo de asesinato en primer grado se castiga con cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.

Con información de Washington Hispanic

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