Familiares de Derek Chauvin no han recibido actualizaciones de su salud tras apuñalamiento en la cárcel
Chauvin, quien cumple una sentencia de 22 años y medio por el asesinato de George Floyd, fue trasladado a la cárcel de Tucson en octubre
La familia del ex policía de Minneapolis, condenado por el asesinato de George Floyd, Derek Chauvin, afirmó no haber podido contactar con él ni saber específicamente cómo está su salud luego de ser apuñalado en una cárcel federal de Arizona.
Gregory M. Erickson, uno de sus abogados, se encargó de criticar la “falta de transparencia” y comunicación de las autoridades penitenciarias, y señaló que la familia de Chauvin ha intentado contactar con la prisión en varias ocasiones, pero no ha recibido respuesta alguna, por lo que han tenido que asumir que Chauvin está estable, y se informan únicamente por las noticias, señaló Associated Press.
“Como forastero, considero esta falta de comunicación con sus abogados y familiares como completamente escandalosa”, dijo Erickson. “Parece ser indicativo de una instalación mal administrada e indica cómo se permitió que ocurriera el asalto de Derek”.
Asimismo, el abogado precisó que los familiares de Chauvin son los responsables de tomar las decisiones sobre su atención médica personal y su contacto de emergencia, y que deberían haber sido informados inmediatamente después del apuñalamiento
“La forma en que los familiares que están a cargo de las decisiones de Derek con respecto a su atención médica personal y su contacto de emergencia no fueron informados después de su apuñalamiento indica aún más los malos procedimientos de la institución y la falta de control institucional”, apuntó.
El pasado viernes, Chauvin sufrió un apuñalamiento por parte de otro preso en la prisión federal de Tucson, Arizona, donde cumple su condena, en un ataque que le causó graves heridas, según fuentes anónimas familiarizadas a Associated Press.
Sin embargo, el portavoz de la oficina del fiscal general de Minnesota, Brian Evans, señaló el sábado que escuchó que espera que Chauvin sobreviva, aunque no dio mayores detalles sobre su condición ni las circunstancias del ataque.
Chauvin venía de ser trasladado a la prisión federal de Tucson en octubre, después de que fuera sentenciado a 22 años y medio de cárcel por el asesinato de George Floyd, un hombre afroamericano que murió asfixiado bajo la rodilla de Chauvin durante un arresto en mayo de 2020.
Según un informe del inspector general del Departamento de Justicia de 2020, la prisión de Tucson tenía un déficit de 28 puestos de guardias y un 40% de los empleados eran temporales o sin experiencia. El informe también reveló que la prisión no cumplía con los estándares mínimos de seguridad, como el uso de detectores de metales, la revisión de las cámaras de vigilancia y la supervisión de los reclusos.
Con información de Associated Press / Politico
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