Federación Boliviana de Fútbol fue involucrada en investigación a narcotraficante uruguayo
Sebastián Marset, quien era dueño y jugador de un equipo de segunda división en Santa Cruz, perdió la categoría cuando se conoció su fuga de Bolivia
Detalle de la banda del capitán de la selección de Bolivia Marcelo Moreno Martins. Crédito: Gaston Brito Miserocchi | Getty Images
La situación en torno a la investigación del presunto narcotraficante uruguayo Sebastián Marset y su relación con el mundo del fútbol en Bolivia sigue generando controversia.
La Federación Boliviana de Fútbol (FBF) ha sido requerida por la Fiscalía para proporcionar información sobre la participación de Marset y otras personas vinculadas en competiciones futbolísticas en el país.
A pesar de que no se realizaron allanamientos en las oficinas de la FBF en Santa Cruz, agentes de la fuerza antidrogas presentaron requerimientos fiscales relacionados con el registro de inscripción y partidos disputados en competencias de cuatro personas, entre las cuales se encuentran Sebastián Marset y Luis Paulo Amorim Santos, una de las identidades falsas utilizadas por el presunto narcotraficante en Bolivia.
Además, uno de los hijos de Marset, quien aparentemente también tiene una identidad falsa, y el futbolista uruguayo Christian Latorre, detenido en julio durante una operación para capturar a Marset, también están siendo investigados en el marco de este caso.
Sebastián Marset, quien era dueño y jugador de un equipo de segunda división en Santa Cruz, perdió la categoría cuando se conoció su fuga del país andino. Por su parte, Latorre jugó en el equipo de Marset y previamente estuvo en el club Blooming de la División Profesional boliviana, cuyas oficinas fueron allanadas por la Fiscalía y la fuerza antinarcóticos en busca de documentación relacionada con el caso. El Blooming ha aclarado que se está investigando a personas y no al club en sí en este proceso.
Sebastián Marset está acusado de liderar una red criminal internacional de tráfico de drogas y es buscado por la Justicia de Uruguay, Brasil y Paraguay, así como por la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA), la Europol e Interpol. Además, se le vincula con el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci en mayo de 2022 en Colombia, aunque Marset ha negado su participación en este crimen. La compleja trama que involucra al mundo del fútbol y al narcotráfico continúa siendo objeto de investigación por parte de las autoridades pertinentes.
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