Este 2023 “se cancela” la Navidad en Belén: una sombra detrás de la guerra
La histórica ciudad de Belén, venerada como el lugar de nacimiento de Jesús, enfrenta una Navidad apagada en medio del conflicto entre Israel y Hamás como telón de fondo
La ciudad bíblica de Belén, tradicionalmente llena de festividades navideñas, se encuentra bajo un manto de tristeza esta Navidad.
Las alegres celebraciones que normalmente marcan la temporada han sido dramáticamente canceladas debido al conflicto en curso entre Israel y el grupo militante Hamás, según informó The Associated Press (AP).
Las calles, alguna vez llenas de turistas y luces de colores, ahora están patrulladas por fuerzas de seguridad palestinas, un marcado contraste con el espíritu festivo habitual de la ciudad.
Noches de paz en la Plaza del Manger
La Plaza del Pesebre de Belén, punto central de las celebraciones navideñas, presenta este año un panorama desolador. Lo que normalmente es un centro de actividad con bandas de música y peregrinos, ahora se ve ensombrecido por alambre de púas y presencia de seguridad.
Un belén en la plaza refleja conmovedoramente el dolor que envuelve a la región, con el niño Jesús representado de una manera que recuerda las trágicas pérdidas en la cercana Gaza.
A poca distancia de Belén se encuentra Gaza, devastada por la guerra, donde el conflicto con Israel ha provocado más de 20,000 víctimas palestinas y desplazamientos generalizados. Los efectos de la guerra se han extendido a Cisjordania, incluida Belén, donde el ambiente festivo ha sido reemplazado por una atmósfera de luto y mayor seguridad.
Impacto económico y emocional en Belén
La ausencia de celebraciones navideñas supone un duro golpe para la economía de Belén, que depende en gran medida del turismo, especialmente durante esta temporada.
Las calles y los negocios que normalmente estarían llenos de actividad están, en cambio, tranquilos, y la comunidad local lidia con las consecuencias más amplias del conflicto.
La cancelación de las celebraciones navideñas es un duro golpe para la economía de Belén, ya que el turismo representa alrededor del 70 por ciento de los ingresos de Belén, principalmente durante la temporada navideña, según la agencia AP.
“Nuestro mensaje cada año en Navidad es de paz y amor, pero este año es un mensaje de tristeza, dolor e ira frente a la comunidad internacional por lo que está sucediendo y sucediendo en la Franja de Gaza”, dijo la alcaldesa de Belén, Hana Haniyeh, en un discurso a la multitud
En una ciudad que simboliza la paz y la esperanza para muchos en todo el mundo, la Navidad de este año está marcada por la tristeza y un llamado a un alto el fuego en Gaza. Los residentes y líderes de Belén expresan su angustia y frustración por la violencia actual, enviando un mensaje que resuena con tristeza en lugar de las tradicionales noticias de alegría y buena voluntad.
Esta Navidad, Belén es un conmovedor recordatorio de la necesidad duradera de paz y reconciliación en una región desgarrada por el conflicto. Las discretas celebraciones son un testimonio de la resiliencia de la comunidad y su esperanza de un futuro donde el espíritu festivo de Belén pueda brillar una vez más.
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