Buscan que hospitales de Nueva York no cierren sin consultar primero con comunidades afectadas
El senador Gustavo Rivera y otros legisladores están impulsando el proyecto de ley en la Legislatura estatal, que exigiría que cuando haya intenciones de clausurar unidades hospitalarias, se tome en cuenta la opinión de vecinos dentro del proceso de toma de decisiones antes de presentar planes al Estado
Por ahí dicen que “la salud es lo primordial”, y contar con opciones de atención médica cercanas, se ha vuelto una preocupación cada vez más creciente para muchos neoyorquinos que han sufrido el cierre de hospitales en sus vecindarios. Casi media decena de instalaciones clínicas están a punto de cerrar o han cerrado durante este 2024 en todos los rincones de Nueva York y en la última década, 10 sitios cerraron sus servicios de maternidad.
Y en su afán de que las necesidades de los pacientes no sean ignoradas, el senador Gustavo Rivera junto a otros legisladores neoyorquinos introdujeron este miércoles en Albany un proyecto de ley, que exigiría que un hospital no pueda clausurar sus servicios sin antes consultar con las comunidades a las que sirve.
La iniciativa, impulsada también por la asambleísta Jo Anne Simon, los senadores Brian Kavanagh, Kristen González, Zellnor Myrie, Michelle Hinchey y Lea Webb, defensores de la salud y sindicatos, requeriría un aviso público y la participación de la comunidad cuando un hospital pretenda cesar labores por completo o cerrar una unidad que brinda servicios de emergencia, maternidad, atención de salud mental o uso de sustancias.
El senador Rivera destacó que en Nueva York varios hospitales han clausurado sin ninguna comunicación previa ni un compromiso significativo con las comunidades locales a las que sirven, pues la Ley de Salud Pública del Estado actual no exige a los centros clínicos informar anticipadamente a los afectados.
“Nuestras comunidades merecen opinar sobre el potencial cierre de sus hospitales locales. Los neoyorquinos merecen transparencia y ser participantes activos cuando hay la posibilidad de perder el acceso a servicios de salud. Sea la unidad de maternidad o al departamento de emergencias más cercano, o incluso a todo el hospital en sí”, manifestó Rivera, presidente del Comité de Salud del Senado y patrocinador del proyecto de ley. “Este proyecto de ley abordará las brechas en la revisión actual que el Estado utiliza para los cierres propuestos de hospitales y unidades críticas y convertirá a nuestras comunidades en una parte clave en un proceso de toma de decisiones con lo que pueda tener graves impactos en la equidad en la salud”.
Los líderes políticos explicaron que actualmente, los cierres de hospitales “se realizan mediante un simple aviso al Departamento de Salud del Estado de Nueva York y un plan de cierre general, y no a través de una solicitud de Certificado de Necesidad (CON)”.
Al celebrarse audiencias con la comunidad, al menos 150 días antes de la fecha programada de cierre propuesta de un hospital, ello permitiría que se tomen en cuenta comentarios públicos sobre el plan, a fin de incidir en las medidas y de darse la clausura, que se tenga un plan para atender a las comunidades afectadas.
Comunidades vulnerables se han visto impactadas con cierres de hospitales como el centro de Brooklyn, después del cese de servicios el año pasado de una clínica y un hospital en el este del condado de Niágara. Asimismo, datos del Centro para la Calidad de la Atención Médica revelan que en este momento hay 27 hospitales rurales en el estado de Nueva York en riesgo de cerrar.