Alexandria en Virginia tiene mucho que ofrecer

A poca distancia de donde se toman las decisiones más importantes a nivel federal que impactan de una u otra forma la vida de los estadounidenses, hay un enclave que ha sabido combinar la modernidad con la preservación de un legado histórico: se trata de la ciudad de Alexandria, al noreste de Virginia y sólo separada de Washington D.C. por el río Potomac.

Aunque cualquier época es atractiva para aprovechar lo que Alexandria tiene para ofrecer, sin duda que una escapada de fin de semana durante la primavera encantará al visitante con toda la buena vibra del ambiente que se respira por el magnetismo que anualmente congrega a propios y extraños en busca de admirar el “Cherry Blossom” (Sakura).

Tanto la buena comida, lugares de primera para hospedaje y la conexión con la riqueza histórica, hacen de esta pequeña localidad el lugar ideal para disfrutar unas cortas vacaciones en un espacio seguro y tranquilo.

“Cuando la gente visita Alexandria puede ver de primera mano lo hermosa que es y todo lo que tiene que brindar. Por un largo tiempo ha estado posicionada entre las ciudades pequeñas más importantes para viajar”, dijo con mucho orgullo Rebecca Doser, directora de Comunicaciones de Visit Alexandria.

De hecho tanto Travel + Leisure como Conde Nast Traveler la han catalogado como uno de los mejores sitios para visitar.

Durante una caminata por puntos históricos de la ciudad, Doser resaltó que ya está en pleno proceso el inicio de los trabajos de revitalización del malecón.  “Queremos mostrar a la gente de la región y a los turistas en general que es un hermoso destino justo al lado del río Potomac y a cinco millas de Washington D.C.  Sientes que estás en una ciudad pero al mismo tiempo te transmite el encanto de un pueblo antiguo”, reafirmó no sin antes recordar que este 2024 Alexandria estará celebrando su 275 aniversario de fundación para lo cual se han organizado una serie de eventos a partir de abril hasta septiembre.

Pequeña pero con sustancia

Desde realizar recorridos por zonas coloniales a través de sus calles empedradas y edificaciones que nos remontan a los siglos 18 y 19, apreciar la casa donde pernoctaba George Washington, quien consideraba a Alexandria como su ciudad adoptiva, o admirar expresiones artísticas en lo que fue una antigua fábrica naval de municiones (Torpedo Factory) y hasta disfrutar de un paseo acuático para observar los monumentos nacionales son solo una pequeña muestra de las opciones que tiene el visitante.

“Después de las elecciones de 2016 sentí que a través de la fotografía podía inspirar un cambio”, manifestó el artista Pedro Ledesma III, en la sala de exhibiciones de Torpedo Factory. 

Y es que Ledesma, de padre mexicano y madre coreana, antes de convertirse de lleno en fotógrafo fue parte del equipo económico de la plantilla del Banco Mundial. 

Viajar le ha permitido captar personas y situaciones con su lente. Parte de su trabajo actual recoge con fuerza lo que representa para él tanto EEUU como los orígenes del hogar donde proviene. “Creo que es importante entender a los hispanos y cómo son tratados, es importante entender a los asiáticos. Muchas cosas se superponen, así como hay diferencias también vemos similitudes. En 2020 estuve en Richmond, VA, durante el movimiento Black Lives Matter (Las vidas de los negros importan) y eso para mi fue un catalizador para entender el rol que juega la raza en Estados Unidos”, exteriorizó mientras explicaba el contenido de las imágenes que cuelgan de las paredes en el cubículo que ocupa con el objetivo de invitar al turista a interpretar el mensaje social que transmiten sus fotos.

En una planta superior del centro de arte de Alexandria, otro hispano da forma laboriosamente a sus creaciones. Nacido en Fairfax, VA, Alexis Gomez es un artista joven que ha encontrado su espacio en el campo de la Realidad Aumentada.

Una computadora con programas sofisticados, herramientas de carpintería y piezas de madera por doquier son algunos de los elementos que utiliza con disciplina y paciencia para sus esculturas que van desde ser diminutas hasta del porte de una persona.

“Como estoy trabajando siempre en varios proyectos a la vez, una figura humana grande me puede tomar hasta dos años desde que la diseño hasta que está lista para entregarse”, explicó Gomez mientras dirige su mirada a una de las obras terminadas que yace en el suelo de su taller.

En promedio este tipo de esculturas pueden requerir  entre 150 y 200 piezas, nos dijo el joven de padres salvadoreños que impulsa sus creaciones gracias a que su talento ha sido tomado en cuenta junto con otros 150 artistas que exhiben sus creaciones.

La estadía

En lo que a hospedaje se refiere, Alexandria se da el lujo de tener uno de los mejores hoteles de la zona. El Hotel AKA Alexandria, que recién este abril tendrá un año de inaugurado.

La huella del diseñador y arquitecto italiano Piero Lissoni salta a la vista. No se escatimó nada para que la experiencia de los huéspedes sea armoniosa pero sofisticada a la vez.

Una sala de cine, un bar iluminado con una nube gigante, decoración elegante con un toque de sobriedad, salones de conferencias y habitaciones ostentosas ponen al Hotel AKA Alexandria en el mapa.

Sin mencionar nombres específicos por normas de confidencialidad, el gerente del hotel, Chris Saputo, resaltó que figuras artísticas y políticas han podido disfrutar de las amenidades que se ofrecen en estas instalaciones.

Sea el Hotel AKA Alexandria u otra de las tantas alternativas de alojamiento en la zona, lo que cuenta es que la ciudad está preparada para que el turista tenga una experiencia única.

Platos, tapas y más…

Aunque en general el sector gastronómico de  Alexandria está a la altura de paladares exigentes, vale la pena mencionar restaurantes como The Study en Morrison House donde el chef costarricense Tomas Chavarría se siente como pez en el agua porque ha perfeccionado un menú impregnado de sabor hispano con cierta influencia asiática y otras variaciones.

“Es increíble ver la influencia asiática en la comida mesoamericana”, explicó con pasión Chavarría mientras iba indicando las características del menú que entre otros platos incluye ceviche, scallops tiradito, empanadas de plátano maduro, y postres como el arroz con leche.

 “Aquí en el Study lo que tratamos de hacer es preservar la historia culinaria, nuestras raíces como latinos pero con los aportes de distintas culturas. Al final del día todo está entrelazado”, aseveró.

Otro restaurante que promete una buena cena es el OAK Steakhouse. Los platos fuertes hacen honor a su nombre con cortes finos y una sazón para chuparse los dedos.

Y si de tapas se trata, quienes visiten Alexandria pueden probar un brunch de primera en el BARCA Pier and Wine Bar, ubicado en pleno malecón.

Nada como saborear un buen pulpo, croquetas, patatas bravas, pinchos de carne, entre otras delicias mientras se disfruta de una vista panorámica de frente a las aguas del Potomac.

Se podrían seguir enumerando muchas más cosas que hacer para pasarla bien en Alexandria, pero el resto le quedará de tarea al futuro visitante.