Silvia Pinal y Enrique Guzmán se reencuentran en la boda de su nieta Giordana
Después de 26 años, Enrique Guzmán pisó de nuevo la residencia de su ex esposa Silvia Pinal, para atestiguar, festejar e incluso cantar en la boda de su nieta Giordana con Justin Engel
Silvia Pinal y Alejandra Guzmán. Crédito: Mezcalent
La dinastía Guzmán-Pinal volvió a reunirse la tarde del sábado para celebrar el amor.
Después de 26 años, Enrique Guzmán pisó de nuevo la residencia de su ex esposa Silvia Pinal, ubicada en Jardines del Pedregal de la CDMX para atestiguar, festejar e incluso cantar en la boda de su nieta Giordana con Justin Engel.
La hija de Luis Enrique Guzmán contrajo matrimonio con un joven extranjero luego de cuatro años de noviazgo.
La ceremonia civil se realizó en la casa de la primera actriz, por lo que fue una celebración íntima y memorable, según declaró Efigenia Ramos, asistente de doña Silvia, quien además se encargó de muchos detalles de la fiesta.
La matriarca de la dinastía Pinal, de 92 años, estuvo feliz en la celebración.
Su médico autorizó que la bajaran de su habitación por un rato para unirse a la fiesta, pero tan contenta estaba que permaneció más tiempo.
“La boda fue ayer (sábado) en la casa. Mi jefa bajó un rato, estuvo ahí y le preguntaba al novio: ‘¿Estás nervioso, güero?’. Es que el novio es muy güero, es de origen español y holandés”, afirmó Ramos.
La novia se veía preciosa, estaba muy contenta como todos los invitados, detalló.
“Quité la sala y quité el comedor”, compartió Efi al dar algunos detalles del lugar de la casa donde tuvo lugar la fiesta. “Y ahí lo hice. Todo estuvo padrísimo”.
La tía de la novia, Alejandra Guzmán, no podía faltar a la boda y también estaba emocionada al ver la felicidad de los novios.
“Ella se echó un palomazo, cantó ‘Loca’. Enrique Guzmán también estuvo presente y cantó”.
Guzmán, quien estuvo casado con Pinal de 1967 a 1976, regresó a la casa de su ex luego de muchos años.
“La última vez que estuvo ahí fue en la boda de Alejandra, en 1998“, confirmó Efi. En esa ocasión, la Guzmán celebró su boda en México con Farell Goodman. Previamente se había casado en Miami.
“Recuerdo bien la fecha porque en esa boda todavía estuvo ahí la mamá de mi jefa, la señora María Luisa, que murió en 1999”, afirmó la asistente.
El festejo se realizó de manera muy cordial. Enrique subió al escenario instalado en la sala de la casa de Pinal, y deleitó a los invitados con la interpretación de “Payasito”.
“Yo hice la comida: hice espagueti al horno y espagueti con mariscos, de dos tipos para que la gente comiera diferente. También hice salmón a la miel, puré de papa y servimos tres tipos de ensaladas”.
La celebración de la boda civil inició a las 12:00 horas del sábado y concluyó al filo de la medianoche.
Un total de 60 invitados se reunieron con la dinastía Guzmán-Pinal para ser partícipes de la boda de Gío y Jus.
“El doctor le dio permiso a mi jefa una hora, pero se aventó más de tres horas abajo (en la fiesta), no se quería subir. Ella estuvo muy contenta y comió de todo“, compartió Efi.
Alejandra compartió en Instagram una fotografía junto a la novia, confirmando que fue un día muy especial para la familia.
“Qué día tan espectacular, hermoso y único para celebrar un amor así de bonito. Felicidades a Justin y Gío, estoy orgullosa de ti”, escribió la rockera.
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