Mujer murió congelada al intentar salvar a su perro en Alaska: la hallaron abrazada a su mascota
Cuatro meses después de desaparecer entre el agua helada del Eagle River de Alaska, los rescatistas ubicaron el cuerpo de Amanda Richmond. "Realmente murió como una heroína", dijo su hermana Jennifer
Amanda Richmond Rogers es la mujer de 45 años que murió congelada en el río Eagle, en Alaska, luego de que saltó para intentar salvar a su perro que había caído al agua helada. Este hecho, que ha conmocionado a muchas personas, ocurrió a finales del año pasado, pero no fue sino hasta finales de marzo que los equipos de rescate confirmaron su muerte al encontrar el cadáver.
La familia indicó en un comunicado en Facebook que el 23 de diciembre de 2023, durante la celebración de su 18° aniversario de boda, Amanda y su esposo Brian Rogers, junto con sus dos perros, estaban dando un paseo a lo largo del Eagle River. Durante la caminata, una de las mascotas cayó mientras bebía agua, lo que llevó a Amanda y Brian a correr hacia él para tratar de ayudarlo.
Trágicamente, en el intento de rescatar al perro, la mujer cayó y no pudo salir a la superficie.
Amanda Richmond Rogers trabajaba como enfermera de sala de emergencias, investigadora de escenas de muerte, enfermera de hospicio pediátrico y además era madre de cuatro niños varones.
Para su búsqueda y rescate se hicieron donaciones destinadas al Equipo de Rescate y Recuperación de Búsqueda de Buceo de Alaska para mantener, reparar y reemplazar el equipo de los socorristas, pagar el combustible, trabajar casos sin resolver, pagar los gastos por adelantado durante las misiones y otras.
“Ella habría hecho esta elección por sus perros y su familia otra vez, sin pensarlo dos veces”, afirmó la familia.
“Amaba a sus perros casi tanto como a nuestros hijos”
Brian Rogers, su esposo, compartió un emotivo mensaje el 28 de diciembre, un día después de que la policía estatal de Alaska le informó a la familia que suspendió la búsqueda:
“A cualquiera que se pregunte porqué saltaríamos para salvar a nuestro perro, solo puedo responderle: nuestros instintos se hicieron cargo y entramos sin pensarlo. Amanda amaba a sus perros casi tanto como a nuestros hijos, eran nuestra familia. Tenemos una habitación en nuestra casa dedicada a la memoria de todos nuestros perros anteriores. Tenemos tatuajes de las patas de nuestro perro. Amanda tiene alrededor de 35 mil fotos y vídeos en su teléfono de nuestros 18 años de matrimonio y la mayoría de ellos de nuestros perros. Ella no saltó para salvar a ‘solo un perro’, era un miembro de la familia. Para mí y nuestros cuatro hijos, ella murió como un héroe”.
“Amanda fue una madre increíble y crió a cuatro hijos tremendos. Ella trabajó como enfermera de emergencias, investigadora de escena de la muerte y enfermera de hospicio pediátrico, pero el trabajo en el que destacó fue mamá. Ella disfrutaba del aire libre, su familia, todos los animales, y la aventura. Ella tocó la vida de tantas personas para mejor. Podría seguir y seguir. Ella era una persona hermosa con un alma hermosa”.
Rescatistas retomaron la búsqueda
Con las donaciones que hicieron muchas personas, el Equipo de Recuperación y Rescate de Búsqueda de Buceo de Alaska logró mandar a reparar su sonar de escaneo a Canadá para así retomar la búsqueda de Amanda, aunque no de forma activa. Efectivamente, el 14 de enero ya los rescatistas estaban nuevamente en la zona donde se ahogó la mujer.
El 24 de marzo, cuatro meses después de desaparecer entre el agua helada, los oficiales lograron localizar el cuerpo de Amanda Richmond, publicó Alaska’s News Source. “Realmente murió como una heroína”, dijo su hermana Jennifer, quien reveló que la mujer fue hallada abrazando a su perro Groot.
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