Pierluisi asegura que Puerto Rico está listo para temporada de huracanes pese a aumento en apagones, según datos de LUMA Energy
El informe sobre interrupciones en el servicio de electricidad que LUMA suministró al Negociado de Energía de Puerto Rico (NEPR) arrojó que el promedio anual de duración de estas alcanzó en marzo pasado su nivel más alto desde septiembre de 2022 cuando se reportó el huracán Fiona
Una protesta en Puerto Rico en octubre de 2021 contra LUMA Energy debido a los apagones en la isla. Crédito: Carlos Giusti | AP
Nueva York – El gobernador de Puerto Rico, Pedro Pierluisi, aseguró que la red eléctrica en la isla está preparada para la temporada de huracanes a pesar de que el último informe trimestral de LUMA Energy, consorcio privado encargado de la transmisión y distribución de la electricidad, señala más interrupciones en el servicio.
“El sistema está preparado. El sistema se ha ido fortaleciendo. Se han hecho reparaciones, mejoras. En el caso de interrupciones, hay que hacer una distinción cuando la interrupción es por una reparación que se está haciendo en las líneas o, por ejemplo, una subestación, a cuando es por una avería. Sea cual sea la razón, si son averías, hay que repararlas”, declaró Pierluisi a periodistas tras un evento oficial este jueves.
El primer mandatario de la isla agregó que más de la mitad de las interrupciones en el servicio o apagones tienen que ver con vegetación, asunto que supuestamente está trabajando LUMA Energy con $1,200 millones provistos por la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA).
A preguntas sobre si Puerto Rico está listo para enfrentar la nueva temporada ciclónica en vista de lo anterior que se sumaría a la ola de calor que se espera este verano, Pierluisi planteó que eso es un tema más de generación de electricidad y que la empresa Genera PR es la encargada de los procesos.
El primer ejecutivo anticipó que, contrario al año pasado, en este no espera que hayan problemas con la generación, porque hay más cantidad disponible.
“El pronóstico es que, para el mes de mayo, que fue cuando tuvimos una gran interrupción porque hubo una ola de calor tremenda, el sistema no pudo suplir la energía requerida. Esperamos que eso no suceda este año, porque vamos a tener una mayor cantidad de generación disponible”, añadió Pierluisi según citado por El Nuevo Día.
“El plan es que entre una de las unidades de Costa Sur en cuestión de días y, entonces, también una unidad de Aguirre, si mal no recuerdo, la #1 o la #2, que son grandes unidades. Deben estar entrando al sistema. Entre las dos, estás hablando como de 800 megavatios adicionales que van a entrar al sistema”, puntualizó.
El informe sobre interrupciones que LUMA suministró al Negociado de Energía de Puerto Rico (NEPR) arrojó que el promedio anual de duración de estas alcanzó en marzo pasado su nivel más alto desde septiembre de 2022. Para esas fechas, los residentes en Puerto Rico sufrieron el embate del huracán Fiona. Inmediatamente luego del evento, se reportó un apagón general en la isla. Tres semanas después del desastre, residentes en algunos pueblos de la isla, principalmente en zonas de difícil acceso, continuaban sin el servicio.
En específico, los datos provistos por LUMA a NEPR señalan que, en el período de 12 meses, entre abril de 2023 y marzo de 2024, los clientes de la red permanecieron sin servicio, 1,414 minutos en promedio, equivalente a casi 24 horas. Esta cifra está 14 veces por encima de los estándares para la industria.
Los clientes de la región San Juan fueron los que experimentaron las interrupciones más largas el mes pasado con un promedio de 193 minutos. Las regiones de Caguas y Utuado le siguen en interrupciones con 174 y 160, respectivamente.
Juan Saca, presidente de LUMA Energy, también adjudicó a la vegetación gran parte de los apagones.
Según manifestó en una conferencia de prensa el lunes, esperan resolver el problema en un periodo de tres años con labores de despeje en 16,000 millas de líneas, subestaciones e infraestructura de telecomunicaciones.
“Luego del primer año, lo que estimamos es que nuestros clientes verán una reducción de un 15% en la frecuencia de interrupciones. Una vez completado, este programa reducirá drásticamente las interrupciones de servicio en todo Puerto Rico hasta un 45%”, anticipó Saca desde el Centro de Convenciones en San Juan.
En un comunicado previo enviado a El Diario, LUMA indicó que más del 50% de todas las interrupciones del servicio se deben a vegetación cerca de las líneas eléctricas.
“Esto es una amenaza importante para la confiabilidad de la red eléctrica, especialmente en condiciones meteorológicas adversas. Para mitigar este riesgo y garantizar un servicio seguro e ininterrumpido para los clientes en todo Puerto Rico, LUMA está lanzando el primer programa proactivo de despeje de vegetación, financiado por el gobierno federal, que mejorará el servicio general para todos los clientes en Puerto Rico. Este es uno de los proyectos más importantes que llevará a cabo la empresa que impactará directamente la confiabilidad del sistema eléctrico”, señalaron desde LUMA.
Las evaluaciones iniciales para identificar y proteger árboles endémicos y la vida silvestre comenzarán en San Juan, Guaynabo, Carolina, Bayamón y Trujillo Alto en las próximas semanas, añadieron.
Según el comunicado, LUMA llevará a cabo despeje de vegetación en áreas estratégicas de Puerto Rico para reducir en un 15% las interrupciones en los primeros meses y hasta un 45% al término de las labores.
La temporada de huracanes 2024 inicia el 1 de junio y se extiende hasta el 30 de noviembre.
Sin embargo, no será hasta el 23 de mayo que la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) emita un pronóstico más certero sobre lo que se espera para ese periodo.
A principios de mes, en un pronóstico inicial, expertos de la Universidad Estatal de Colorado estimaron unas 23 tormentas con nombre en el Atlántico durante esta temporada, de las cuales 11 se podrían convertir en huracanes y cinco alcanzarían fuerza de huracán mayor (Saffir/Simpson Categoría 3-4-5) con vientos sostenidos de 111 millas por hora o más.
La ubicación de Puerto Rico en el Caribe hace a la isla más susceptible al impacto de sistemas como huracanes. En el 2017, el archipiélago sufrió el embate de dos huracanes, Irma y María. Más de seis años después, el territorio aún no se recupera ni se reconstruye completamente de la catástrofe.
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