US Open: Sinner supera el escollo más difícil en Medvedev y se mete en semis
El número 1 del mundo superó al campeón de 2021 por 6-2, 1-6, 6-1 y 6-4 para meterse en semifinales, donde se enfrentará al británico Jack Draper
Jannik Sinner golpea desde la línea de foto. Crédito: Dino García | Cortesía
QUEENS, NY – Para mucho era la final anticipada del US Open. Eso lo sabremos de aquí al domingo. Pero lo cierto es que Jannik Sinner y Daniil Medvedev dejaron momentos de tenis de altísimo nivel en las dos horas y 29 minutos de su partido de cuartos de final. El italiano, número 1 del mundo, avanzó a costo del ruso con un 6-2, 1-6, 6-1 y 6-4 más equilibrado que lo que hace indicar ese marcador.
Fue un duelo de pegadores, de dos jugadores tan espigados como rápidos que dominan el juego desde la línea de fondo como casi nadie. Llegan a todas y las devuelven casi todas. La mayoría lamiendo las líneas. El choque fue una partida de ajedrez en que uno tomaba ventaja y el otro respondía ajustando su juego para recuperar terreno.
También fue un duelo entre dos de los jugadores más fríos del circuito. Rara vez se dirigen al público o celebran un punto con efusividad. Las noches en el Arthur Ashe, con los cócteles “honey duce” corriendo por las gradas, piden otra cosa. Pero ellos estaban a lo suyo, sin mirarse a la cara cuando se cruzaban en los descansos.
Sinner, 23 años, y Medvedev, 28, habían jugado este año la final del Abierto de Australia y los cuartos de final de Wimbledon, ambos partidos de cinco sets. El italiano ganó en Melbourne para lograr su hasta ahora único torneo “grande”. Esta noche también se vengó del choque previo en Londres.
“Nos conocemos muy bien. Nos enfrentamos en Australia este año, después en Londres… Sabíamos que podía ser un partido muy físico”, dijo Sinner aún sobre la pista al finalizar el partido.
Con esta victoria, Sinner alcanza 21 partidos de Grand Slam ganados este año, más que nadie. Se convierte además en el tercer italiano en alcanzar la semifinal en Nueva York en la Era Open después de Barazzutti en 1977 y Berrettini en 2019.
Un partido de idas y venidas
Medvedev arrancó errático con su saque, cometiendo dos dobles faltas en el primer juego del partido y después cediendo un break en el tercero. Mientras, Sinner ganaba sus juegos al servicio con mayor comodidad, obligando al ruso a jugar muy al fondo de la pista, sin opciones de ataque. Un segundo break en el séptimo juego dejó el primer set visto para sentencia.
Medvedev necesitaba un cambio en su juego y lo encontró. Más agresivo, combinó subidas a la red incluso con alguna dejada, un recurso que no acostumbra a utilizar. Así logró pronto un break e inclinó el segundo set de su lado.
Se vieron puntos brillantes, largos intercambios que lograron lo imposible: enmudecer –o casi– el Arthur Ashe. Fue el mejor set, es más igualado, aunque no lo parezca por el marcador.
Entones, cuando parecía golpeado, reaccionó el mejor Sinner, que ganó 5 juegos al hilo para volar por el tercer set. Al ruso no le salía nada, mientras que la bola del italiano no hacía más que acariciar las líneas.
El cuarto volvió a ser un parcial disputado. Medvedev, que estaba jugando mejor, dominando la mayoría de los puntos, dejó escapar las dos primeras bolas de break del set en el sexto juego. Como pasa a menudo, las oportunidades perdidas le pasaron factura. Cedió su saque en el siguiente juego y se generó una cuesta arriba que ya no supo remontar.
Un estadounidense en la final
Sinner jugará la semifinal el viernes ante el inglés de 22 años Jack Draper, que al superar a Alex de Minaur se convirtió en el primer británico en meterse entre los cuatro mejores del US Open desde que Andy Murray saliera campeón en 2012. Draper no ha cedido un solo set en todo el torneo.
La otra semifinal entre Taylor Fritz y Frances Tiafoe llevará a un estadounidense a luchar por el título el domingo por primera vez desde que Andy Roddick enfrentara a Roger Federer en la final de 2006.
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