3 trucos para cocinar las legumbres sin que nos den gases

Una nutricionista explica cómo cocinar las legumbres para evitar que nos den gases

Agregar especias a las legumbres es una manera de disminuir los gases.

Agrega especias a las legumbres es una manera de disminuir los gases. Crédito: Shutterstock

Ricos en fibra, hidratos de carbono y proteínas vegetales, las legumbres son uno de los alimentos más nutritivos, por lo que se recomienda incluirlos en la alimentación para obtener sus beneficios. Sin embargo, estos puede generar gases y molestias digestivas, que se pueden evitar con algunas recomendaciones de los nutricionistas.

En esta entrega revisaremos lo que debemos hacer para evitar los gases que generan las legumbres, de acuerdo con las recomendaciones de la nutricionista Sandra Moñino, quien explica en la Cadena de Ondas Populares Españolas 3 trucos claves para que lograrlo.

Legumbres: fuente de nutrientes

Aunque todas las legumbres aportan beneficios para la salud, no todas son iguales, ya que los frijoles blancos,  negras y pintas contiene un alto nivel de proteína vegetal; las lentejas son ricas en hierro; los garbanzos son ricos en minerales como calcio, potasio, magnesio y hierro vegetal.

 Mientras que los guisantes aportan potasio, magnesio y vitamina B y el maní, que es una legumbre, aunque se había considerado un fruto seco, proporciona grasas y proteínas.

Cómo evitar que las legumbres generen molestias

Lo cierto es que a pesar de los múltiples beneficios, las legumbres pueden generar molestias intestinales, entre ellos gases.

Moñino recomienda 3 cosas básicas para evitar los gases: remojar con suficiente tiempo, agregar especias que reducen los gases y cocinar a fuego lento.

Remojar desde la noche anterior: la principal recomendación de la especialista y es una práctica común entre las personas que cocinas legumbres, es remojarlas en agua al menos 12 horas, preferiblemente desde la noche anterior, ya que esto permitirá que se hidraten y luego se descarta el agua del remojo y se agrega agua nuevamente cuando se va a cocinar.

Agregar especias que reducen los gases: un truco que puede ayudar a disminuir los efectos de los gases de las legumbres es agregar especias como el clavo de olor, puesto que estos “reducen la cantidad de gases que pueden proporcionar estas y acompañarlas muy bien con buena ración de proteína extra, como por ejemplo puede ser un buen huevo cocido, y con una buena ración de ensalada”, explica.

Cocinar a fuego lento: la cocción lenta es clave para evitar los gases, por lo que hay que “ponerlas en una olla y mantenerlas durante al menos dos o tres horas para que se cocinen bien”. Este paso es muy importante, y en caso de no poder hacerlo se recomienda comprar las legumbres cocinadas a la venta en los supermercados en frascos. La explicación que da Moñino es que las legumbres llevan durante mucho tiempo a remojo, mucho tiempo cocinadas “y entonces suelen sentar bastante mejor”.

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