Matrimonio ganó $9 millones en la lotería y decidió donar el 70% de su premio

La lotería siempre ha representado un símbolo de esperanza para quienes sueñan con una vida diferente. Desde personas que anhelan superar dificultades económicas hasta quienes desean cumplir metas aparentemente imposibles, cada boleto encierra un universo de posibilidades.

Pero ganar la lotería no solo cambia la vida de quien recibe el premio; también puede impactar profundamente a las comunidades, como lo demuestra la inspiradora historia de Ray y Barbara Wragg, un matrimonio británico que decidió compartir su fortuna para mejorar el mundo.

En 2000, Ray y Barbara ganaron más de $9 millones de dólares en la Lotería Nacional del Reino Unido. Aunque su reacción inicial fue de alegría moderada, lo que vino después marcó la diferencia: decidieron donar más del 70% de su premio a causas benéficas, dejando un legado imborrable.

Una noticia que cambió su vida

Ray, trabajador en una fábrica y seguidor apasionado del Sheffield United, llevaba una vida sencilla junto a su esposa Barbara. Al enterarse de que habían ganado la lotería, no hubo alardes ni celebraciones extravagantes. En cambio, compartieron la noticia con calma. Ray abrió una lata de cerveza Guinness y Barbara, una copa de vino, antes de llamar a sus hijos para comunicarles el gran acontecimiento.

De inmediato, Ray tomó una decisión que muchos soñarían: llamó a su jefe para anunciar que no volvería a trabajar. La pareja comenzó su nueva etapa con pequeños lujos personales, como la compra de un Range Rover valorado en $63,000 y un crucero por el Caribe, ya que Barbara tenía miedo de volar en avión. Sin embargo, durante esas vacaciones reflexionaron profundamente sobre el premio y concluyeron que el dinero era más de lo que necesitaban.

A partir de esta conclusión, La pareja optó por utilizar su fortuna para ayudar a otros. En total, donaron cerca de $6,8 millones a familiares, amigos y 17 organizaciones benéficas, principalmente en el ámbito de la salud.

Uno de los primeros destinos del dinero fue el Hospital Weston Park, donde su hija había recibido tratamiento contra el sarcoma de Ewing, un tipo de cáncer poco común. Compraron 30 televisores para los niños ingresados en el hospital, permitiéndoles disfrutar de programas infantiles durante su estancia. Además, financiaron la adquisición de un escáner de vejiga para el Hospital Sheffield Hallamshire, que mejoró significativamente la atención médica en la región.

Pero su generosidad no se detuvo ahí. En el Hospital Royal Hallamshire, Barbara quedó impactada al ver un bote de donaciones en la clínica de radiología mamaria. Decidió hacer un cheque por $6,200, lo que permitió financiar un año completo de investigaciones realizadas por jóvenes científicos. Estas donaciones marcaron una gran diferencia en los recursos disponibles para los pacientes y los equipos médicos.

El compromiso filantrópico de Ray y Barbara fue ampliamente reconocido. La pareja recibió una invitación al Palacio de Buckingham y fue homenajeada en los premios Pride of Britain, que celebran actos heroicos y generosos en el Reino Unido. Sin embargo, para ellos, el mayor reconocimiento fue saber que su dinero estaba haciendo el bien.

En entrevistas, Barbara describió la satisfacción de ayudar a otros como una experiencia transformadora. “No necesitamos tanto dinero”, comentó en una ocasión, resaltando que su objetivo era usar el premio para beneficiar a quienes más lo necesitaban.

Lamentablemente, Barbara falleció en 2018 a los 77 años debido a una sepsis. Ray, aunque devastado por la pérdida, continúa viviendo una vida humilde, recordando con orgullo el impacto positivo que ambos lograron.

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