Adolescente latino baleado en la cabeza: agonía en Nueva York
Un adolescente hispano de 17 años murió en el hospital días después de recibir un disparo en la cabeza en NYC. El pistolero no ha sido arrestado
NYPD investiga el caso. Crédito: Andrés Correa Guatarasma | Cortesía
Tamari Carmona, adolescente de 17 años, murió en el hospital días después de recibir un disparo en la cabeza en Brooklyn (NYC).
Carmona se encontraba en el complejo de apartamentos Flatbush Gardens en Flatbush alrededor de las 12:30 a.m. del martes 29 de abril, cuando tres hombres vestidos de negro lo confrontaron. Uno de ellos sacó una pistola y abrió fuego, impactando al adolescente en la cabeza, reseñó Daily News.
Según la Policía de Nueva York, los tres sospechoso escaparon hacia New York Av. El personal de emergencias médicas trasladó a Carmona al Kings County Hospital Center, donde falleció a causa de sus heridas el jueves 1 de mayo. No se han realizado arrestos y se desconoce qué desencadenó la violencia.
Los investigadores recuperaron un revólver en el lugar de los hechos, así como siete casquillos de bala de 9 mm y una bala calibre .38, dijeron fuentes policiales. Carmona vivía en Coney Island, a pocas cuadras de donde días antes Javon Johnnie, de 18 años, había recibido un disparo mortal en el pecho cerca de W. 36th St. y Surf Ave. alrededor de las 5 p.m. del 27 de abril.
Johnnie fue trasladado de urgencia al NYU Langone Hospital-Brooklyn, pero no pudo ser salvado. La policía sigue buscando a ese pistolero. No se ha determinado si ambos homicidios están relacionados.
No se han realizado arrestos ni identificado sospechosos en ninguno de estos casos. Quien posea información debe llamar a 1-800-577-TIPS (8477) y en español 1-888-57-PISTA (74782). También a través de la página crimestoppers.nypdonline.org o por mensaje de texto a 274637 (CRIMES), seguido por TIP577. Todas las comunicaciones son estrictamente confidenciales.
La violencia armada es constante en Nueva York y algunas víctimas son alcanzadas al azar con armas blancas y de fuego en calles, escuelas, el transporte público, edificios, negocios, áreas de cajeros automáticos ATM y hasta dentro de hospitales. Los enfrentamientos suelen estar vinculados con batallas entre pandilleros por el territorio, y los sospechosos a veces se incriminan al alardear y publicar sobre sus crímenes en las redes sociales.
La semana pasada un menor de 16 años que fue atrapado con un arma en su escuela fue vinculado a un tiroteo que dejó a un padre hispano muerto en Harlem (NYC).
El mes pasado 16 presuntos miembros -13 de ellos menores de edad- de las pandillas “L.A. World” y “Wusk” fueron acusados de desatar una guerra callejera que atormentó a los residentes de Harlem durante meses, anunciaron el alcalde Eric Adams y funcionarios de NYPD. En el operativo la policía recuperó 15 armas semiautomáticas. Previamente 20 presuntos miembros de “800 YGs”, una notoria pandilla en El Bronx (NYC) con un “absoluto desprecio por la vida humana”, fueron acusados de numerosos tiroteos y un homicidio.
