Excompañero de celda habla sobre Luigi Mangione, su trabajo, su rutina y su comportamiento dentro de la cárcel de Brooklyn
Michael Daddea se le presentaron cargos federales por imprimir en 3D más de 25 "pistolas fantasmas", parecidas a las que usó Luigi Mangione

Mangione agradeció además a quienes han donado a su cuenta de comisariato, indicando que sus contribuciones le han permitido comprar varias cosas que le sirven en la cárcel. Crédito: Curtis Means/Pool | AP
Las labores de Luigi Mangione en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn en Sunset Parkes limpiar duchas, y es un comité de bienvenida de una sola persona, de acuerdo con excompañero de prisión.
Cuando Michael Daddea llego a la cárcel federal, un guardia le dijo que estaría alojado en la misma unidad que el acusado de asesinar a Brian Thompson, de 50 años, director ejecutivo de UnitedHealthcare, dio a conocer en un video publicado en X.
“Les dije: ‘Sí, se está haciendo el listo’… Miré por la celda y vi a Luigi allí de pie, y me dijo: ‘¿Qué tal?’. Era súper amable. Se presentó de inmediato. Llevo literalmente 10 minutos en la unidad”, recordó Daddea, de 29 años, en el vídeo del 7 de junio, que acumuló más de 80,000 visualizaciones antes de que lo borraran de su perfil esta semana.
En el mes de febrero, a Daddea se le presentaron cargos federales por supuestamente imprimir en 3D más de 25 “pistolas fantasmas” imposibles de rastrear, no muy diferentes a la que usó Mangione, de 27 años, para matar a Thompson en una acera de Manhattan el 4 de diciembre.
El acusado, compañero de Mangione, solo pasó dos noches en la unidad 4G de la cárcel federal antes de pagar una fianza de $250,000 dólares en su lectura de cargos el 7 de marzo, de acuerdo con la oficina del fiscal federal de Brooklyn.
Pero asegura que él, un compañero de prisión apodado “V” y Mangione no perdieron tiempo en hacerse amigos.
“Me acerqué a estrecharle la mano a Luigi y le dije: ‘Es un honor conocerte’. Se dio la vuelta y me dijo: ‘Ustedes dos son los primeros chicos que entraron aquí que sabían quién era o que incluso les importaba’”, recordó Daddea.
“Supongo que debe haber visto a otro niño blanco y pensó: ‘Finalmente'”, teorizó Daddea en el video.
Mangione, quien ha sido un “prisionero modelo” en sus más de 175 días de prisión preventiva, de acuerdo con sus abogados, es un “collie”, que es un término usado para referirse a los reos con trabajos en la cárcel, indicó Daddea en el clip.
“Así que un collie podría ser como un jefe de unidad que te dice a qué celda vas. Luigi era un collie que limpia las duchas”, manifestó, y agregó que otros trabajos de un collie incluyen preparar comidas y limpiar bandejas, informó New York Post.
Cuando Mangione no está limpiando las duchas o dando vueltas por la unidad, busca su nombre en las noticias locales, apuntó el hombre.
“Luigi recibe el periódico New York todos los días… me pedía que lo ayudara a revisar algunos para ver si había artículos sobre él [sic]”, escribió en la sección de comentarios del video de X.
Daddea explicó que él y Mangione, ambos católicos, “hicieron el Miércoles de Ceniza”, cuando un cura entró y les puso las cruces de carbón en la frente el 5 de marzo, y comieron todas las comidas juntos.
“Así que nos sentábamos juntos. Luigi cogía sus cosas y venía a sentarse con nosotros todos los días. Comíamos sin parar, sin más”, dijo.
En una comunicación electrónica enviada desde la cárcel el 3 de junio, Mangione enumeró las cosas por las que estaba agradecido, entre ellas, el catálogo de música de la Oficina de Prisiones, “Los jueves de pollo y la salsa de barbacoa de Sweet Baby Ray” y los miles de libros y cartas que la gente o fans le había enviado por correo.
Asimismo, escribió que su compañero de cerda, ‘J’, “tolera el desorden de todos mis papeles, comparte su sabiduría única y no duda en humillarme cuando lo necesito”, y que el personal del MDC y los funcionarios penitenciarios “no se parecen en nada a lo que ‘Cadena perpetua’ o ‘El experimento de la prisión de Stanford’ me hicieron creer”, a pesar de “alguna pequeña disidencia ocasional”.
Mangione agradeció además a quienes han donado a su cuenta de comisariato, indicando que sus contribuciones le han permitido comprar una tableta, canciones, sellos, productos de higiene, salsa barbacoa, saborizante Goya Sazón, mantequilla de maní y paquetes de atún.
El acusado se declaró inocente de asesinato en primer grado.
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