Lululemon demanda a Costco por vender copias de sus productos a precio mínimo

Lululemon, una marca de ropa casual y deportiva entabló una demanda contra el minorista Costco para que deje de vender productos que considera copias a un precio considerablemente menor de algunas de sus prendas más populares. Además, exige una indemnización por daños y perjuicios.

La marca de ropa asegura en su demanda presentada en el Tribunal para el Distrito Central de California que Costco ha “comerciado ilegalmente” con su reputación, buena voluntad y esfuerzo personal al vender prendas no autorizadas y sin licencia que utilizan versiones falsificadas e infractoras de sus patentes.

Lululemon asegura que Costco suele usar fabricantes de productos de marcas populares para su marca propia, Kirkland, pero sin informar a los consumidores sobre la conexión que existe entre ellos y esto provoca que algunos compradores creen que los productos de la marca Kirkland son fabricados por el proveedor auténtico de los productos “originales” y que Costco no se preocupa por aclarar esta ambigüedad.

“Como empresa líder en innovación que invierte significativamente en la investigación, el desarrollo y el diseño de nuestros productos, tomamos muy en serio la responsabilidad de proteger y hacer cumplir nuestros derechos de propiedad intelectual y emprendemos las acciones legales apropiadas cuando es necesario”, planteó la línea de ropa en un comunicado.

Por ello, Lululemon solicito iniciar un juicio con un jurado que obligue a Costco a dejar de vender los productos que considera duplicados y exige una indemnización por daños y perjuicios.

¿Qué productos asegura Lululemon que Costco pirateó para sus tiendas?

De acuerdo con la demanda, Costco está duplicando productos como sus populares sudaderas con capucha Scuba, chaquetas Define y pantalones ABC. Como ejemplo, señaló el caso de la chaqueta Hi-Tec Scuba Full Zip para hombre, con un precio de $19.97, cuando las chaquetas originales de Lululemon alcanzan precios superiores a los $100.

Este caso ejemplifica cómo las redes sociales están impulsando la cultura de las compras en línea a otros niveles, con factores como la popularidad de un personaje y sus recomendaciones: “¿Quieres probar las pantuflas peludas de Hermès de $1,000? Target tiene una versión por $15. ¿Buscas un bolso hobo de Bottega Veneta de $2,800? Hay una versión por $99 en la nueva tienda de ropa y accesorios en línea Quince, que se ha convertido en una opción predilecta para los amantes de la moda”, son algunos ejemplos de lo que puedes encontrar en los videoblogs de personajes destacados.

Sin embargo, no es la primera vez que Lululemon acusa un plagio en el diseño de sus prendas, debido a sus altos precios. De hecho, en su demanda contra Costco, la marca de ropa deportiva asegura que varias empresas han “copiado” su ropa para vender productos más económicos, incluso usando hashtags como “LululemonDupes” (Lululemon imitaciones) en redes sociales.

Pero esta práctica, además de ilegal, es muy común en el mercado. Las empresas encontraron una importante fuente de ingresos lanzando productos más económicos para compradores que buscan imitaciones de marcas conocidas o de diseño costosas, a menudo a través de marcas propias o genéricas.

A diferencia de las copias directas del producto con una marca registrada o el logotipo de una marca patentada no autorizados, las imitaciones puras que solo replican ciertas características suelen ser legítimas. Incluso pueden despertar el interés por los artículos originales.

Pero el creciente frenesí por las imitaciones, particularmente en la industria de la moda, muestra que muchos compradores quieren probar el lujo, pero ya no quieren pagar lo que cuesta el producto auténtico.

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