Murió niño baleado yendo a la escuela en Queens, Nueva York
Un niño de 13 años falleció en el hospital donde estuvo en coma dos días después de haber sido baleado en la cabeza yendo a la escuela en Queens (NYC)
Linden Boulevard, Cambria Heights, Queens, NYC. Crédito: Google Maps
Sanjay Samuel, niño de 13 años, murió ayer en el hospital donde estaba en coma, dos días después de haber sido baleado en la cabeza camino a la escuela en Queens (NYC).
El niño se dirigía a la escuela el lunes por la mañana cuando recibió un disparo en el estacionamiento de una tienda Dunkin’ en Linden Boulevard, Cambria Heights, alrededor de las 8:21 a.m. Una buena samaritana, Tamika Browm (42), había sido alertada del tiroteo al entrar en una tienda cercana y corrió a ayudar al niño y llamó al 911. Fue llevado al hospital en estado crítico.
La familia había estado debatiendo si desconectarlo del soporte vital mientras yacía en coma en Cohen Children’s Medical Center con una bala alojada en el cerebro. Su padre, Theophilus Samuel, y otros familiares estaban en la habitación del hospital con él cuando fue declarado muerto alrededor de las 12:25 p.m. del miércoles.
“Le realizaron procedimientos y no notaron actividad cerebral. No había ninguna”, dijo a Daily News el padre. “Estaba devastado. No podía creerlo. Pensaba: ‘¿Por qué mi hijo? Es muy duro y difícil'”. “No piensas bien y simplemente me quedo sin palabras”, añadió.
Un video de vigilancia mostró a la víctima con unos cuatro amigos en el estacionamiento de un centro comercial cerca de Springfield y Linden Blvds. cuando un joven armado llegó en una moto, discutió con Sanjay, sacó un arma y le disparó, según un trabajador de un negocio local que vio el perturbador video.
“Es un cobarde”, dijo el martes el padre del niño sobre el pistolero. ¿Cómo puedes vivir con esto? Ahora mismo, probablemente estés emocionado. Pero con el tiempo, tienes que reflexionar sobre esto… ´Le quité la vida a otra persona´”.
No está claro por qué la víctima pudo haber sido atacada. No se han realizado arrestos, pero fuentes policiales informaron que los investigadores han identificado a un sospechoso y lo están buscando.
Los vecinos recordaron a otro niño que murió en la misma intersección y la esquina fue rebautizada en su honor: Kevin Miller, un transeúnte inocente de 13 años, quien salió de un McDonald’s y se encontró con un tiroteo entre pandillas hace 16 años.
“Es otro chico de 13 años, justo en esta misma esquina”, dijo el lunes Lance Feurtado, director ejecutivo y fundador de King of Kings Foundation, un grupo que intenta mitigar la violencia en lugares conocidos como éste de la ciudad, donde los niños se reúnen después de la escuela, y les ayuda a llegar sanos y salvos a casa. Ahora temen cualquier posible represalia después de la balacera mortal.
NYPD celebró una reducción del 23% en los tiroteos este año, de 649 a 500 hasta el domingo 3 de agosto. Los homicidios también disminuyeron 25%, de 241 (2024) a 179 a ese momento en 2025. Sin embargo, la violencia callejera con golpes y armas de fuego y blancas es constante en Nueva York, incluyendo ataques a a agentes de NYPD. Algunas víctimas son alcanzadas al azar. Los enfrentamientos suelen estar vinculados con batallas entre pandilleros por el territorio, y los sospechosos a veces se incriminan al alardear y publicar sobre sus crímenes en las redes sociales.
En julio dos jóvenes, uno de ellos hispano, murieron baleados en la entrada del parque Ferry Point en El Bronx (NYC). En mayo un adolescente fue apuñalado en la cabeza en una calle de Queens (NYC) a media mañana.
En febrero un niño de 14 años fue fatalmente acuchillado en una pelea entre un grupo de estudiantes afuera de un restaurante McDonald’s en Queens el Día de San Valentín. Luego dos adolescentes fueron arrestados por ese homicidio.
En mayo de 2024 cuatro estudiantes fueron acuchillados en un lapso de pocas horas en incidentes dentro y fuera de tres escuelas en Queens, Manhattan y El Bronx. En octubre de 2023 un alumno de 13 años murió acuchillado por otro de 14 al salir de clases dentro de un bus MTA en Staten Island (NYC).
A fines de agosto una mujer de 69 años que caminaba con una andadera fue alcanzada mortalmente en la cara por una bala perdida a una cuadra de su casa durante un tiroteo a plena luz del día en East Harlem, tras salir de un restaurante chino.