¿De dónde vienen los escalofriantes sonidos que produce la aurora boreal?
En una noche helada y tranquila en el Polo Norte se puede escuchar un ruido misterioso que viene del cielo, en la misma dirección de donde bailan las luces del norte.
Cuando el cielo invernal del Ártico está despejado, es posible ver el espectáculo de las luces verdes de las auroras.
Y si todo está quieto, un sonido que apenas dura unos minutos te puede dejar helado.
Quienes han sido testigos de este ruido lo describen como lo que se escucha cuando una radio no está sintonizada radio , como un leve crujido o incluso como un tenue silbido; sonidos que pasaron a formar parte de la cultura popular de los residentes del Ártico norte y que incluso se llegó a pensar que no existían.
Una noche de 1990, en una de sus visitas a Lapland, en el norte de Finlandia, el investigador Unto Laine, profesor de la U niversidad Aalto, en Helsinki, escuchó unos sonidos “muy bajos, pero extraños que venían de la aurora boreal”.
“¡Hacía -32ºC! Y este episodio nunca dejó de darme vueltas”, le cuenta a BBC Mundo.
Así que decidió aclarar el misterio del sonido de las auroras, pues algunos expertos insistían que estas luces estaban demasiado lejos como para que se pudieran oír, si es que emitían algún sonido.
La aurora boreal se produce cuando las partículas cargadas por el Sol chocan contra la atmósfera de la Tierra y nuestro campo magnético las dirige hacia los polos. Por eso se habla de aurora boreal para el Polo Norte y de austral para el Sur.
“Fiesta” en el cielo
En 2012, Laine com probó que no sólo estos sonidos existen, sino que se crean con las luces del norte, que se forman a 70 km de la superficie de la Tierra.
“Es sorprendente la riqueza de estos sonidos que van desde crujidos, zumbidos y hasta algo parecido al ruido que se escucha en una fiesta cóctel”, explica este ingeniero en acústica.
Ahora, combinando sus mediciones con datos de temperatura atmosférica tomados por el Instituto de Meteorología de Finlandia, el experto tiene una explicación de cómo se originan.
Son esas mismas partículas atrapadas en una capa de la atmósfera que se forma durante las noches frías del ártico y que al descargarse con rapidez, producen los extraños sonidos.
La clave de esto está en lo que se conoce como la capa invertida, una región de la atmósfera donde con la altura también aumenta la temperatura.
Buena explicación
“Este aire caliente no se mezcla, sino que se eleva a una capa más fría y empuja la carga negativa al suelo. El aire frío está cargado positivamente, y finalmente una tormenta geomagnética libera la carga acumulada, creando los sonidos”.
El equipo de Laine comprobó que este fenómeno ocurre a la misma altura que se crean las auroras.
Para Dirk Lummerzheim, experto en auroras de la universidad de Alaska, Estados Unidos, esta es la primera vez que estos sonidos se estudian como una señal acústica y no como un sonido creado por el cerebro humano.
“El doctor Laine ha propuesto un proceso físico que ofrece una buena explicación”, le dijo a la revista National Geographic.
El experto finlandés cuenta con más de 60 grabaciones de sonidos producidos por las auroras.