Autorizan a condenado por espionaje a ir a Cuba
Jueza autoriza a René González, condenado por espionaje en EEUU, y bajo libertad condicional, a ir a Cuba
MIAMI, Florida (EFE).- Una jueza estadounidense aceptó hoy la petición del cubano René González, condenado por espionaje en Estados Unidos y en régimen de libertad condicional en Miami, para que se le permita viajar a Cuba a visitar a su hermano enfermo.
Según la orden judicial emitida hoy por la jueza Joan A. Lenard, a la que tuvo acceso Efe, González podrá realizar esa visita a su hermano Roberto González, pero no podrá estar fuera de Estados Unidos durante más de dos semanas.
La jueza impone para ello algunas condiciones más, como que González “obtenga todos los permisos necesarios, licencias y/o autorizaciones del Gobierno de Estados Unidos, incluidos del Departamento de Estado y del Departamento del Tesoro”.
Además, debe “presentar a los oficiales que siguen su libertad bajo fianza el itinerario detallado y por escrito de su viaje, incluidos números de vuelo, rutas, localización e información de contacto, así como copias de todos los permisos y licencias obtenidas del Gobierno de Estados Unidos”.
Una condición más impuesta por la jueza es que, “durante su ausencia del distrito de supervisión, informe telefónicamente a los oficiales de su libertad condicional tal y como se le pida que haga”.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos se había opuesto a esta concesión argumentando que González podría reunirse con funcionarios de la inteligencia cubana, lo que despertaba “preocupaciones de seguridad para la Oficina Federal de Investigaciones (FBI)”.
Al respecto, la defensa del cubano contestó que los alegatos del Gobierno estadounidense para oponerse al viaje de su cliente a Cuba, además de recurrir a una “fraseología nebulosa”, carecían de fundamento.
“Aparte del uso de esta fraseología nebulosa, el argumento no enumera absolutamente ningún tipo de preocupaciones actuales y aparentemente busca basarse solo en pruebas recabadas hace casi dos décadas y presentadas en un juicio de hace más de una década”, replicó el abogado Philip Horowitz en un documento judicial.
Horowitz presentó el pasado 24 de febrero una moción para que González, quien también tiene la ciudadanía estadounidense, pudiera visitar a un hermano que está en condición grave por padecer cáncer de pulmón y un tumor maligno en el cerebro.
La solicitud fue rechazada por la fiscal federal Caroline Heck Miller diciendo que, aun, cuando Estados Unidos comprende la naturaleza de la petición, le preocupa que González se reúna y consulte con agentes de Inteligencia y funcionarios de Cuba con el propósito de favorecer los intereses del Gobierno cubano contrarios a los de este país.
“Oponerse a ese tipo de solicitud con una teoría que carece de respaldo o de documentación, muestra la naturaleza punitiva de mantener a René González bajo libertad supervisada en vez de permitirle que retorne a su familia bajo una base más permanente”, refutó el letrado en su escrito.
Con su “ejemplar comportamiento” durante su libertad supervisada, González ha probado que “no debe ser causa de preocupación”, agrega.
El abogado subrayó además que su cliente es consciente de que permanece bajo libertad supervisada, no violará ninguna de las condiciones impuestas y suministrará “con el mayor agrado” su itinerario de viaje y otros datos que le exijan.
El cubano, un ingeniero de vuelo, pasó trece años en una prisión estadounidense, salió en libertad el 7 de octubre de 2011 de una cárcel del estado de Florida y ahora cumple tres años de libertad supervisada.
René González, Gerardo Hernández, Ramón Labaniño, Fernando González y Antonio Guerrero fueron hallados culpables en 2001 de conspirar y operar como agentes extranjeros sin notificar al Gobierno estadounidense, tras desmantelar el FBI la red de espionaje “Avispa” en 1998.
La red se infiltró en grupos del exilio cubano y espió instalaciones militares estadounidenses en el sur de Florida, según las autoridades.
“Los Cinco”, como son conocidos en Cuba, admitieron que eran agentes del Gobierno cubano, pero afirmaron que espiaban a “grupos terroristas de exiliados que conspiraban” contra el entonces mandatario Fidel Castro, y no al Gobierno estadounidense.
Rene González fue condenado a 15 años de cárcel, que por buena conducta se redujeron a 13; Labañino a 30 años; Fernando González a 17 años; Hernández, considerado el líder de la red, a dos cadenas perpetuas y Antonio Guerrero a 21 años.