¡Agónica victoria!
'Cubo' Torres ayuda a que México derrote a Panamá
No llegaron a ser más de nueve mil, pero los mexicanos que asistieron anoche al Home Depot Center para ver al Tri Sub-23 hicieron todo lo posible para armar un buen ambiente.
El conjunto azteca saltó a la cancha del estadio de Carson con el boleto asegurado a la fase semifinal del Torneo Preolímpico de la Concacaf en la bolsa y su triunfo de ayer, de 1-0 ante Panamá, lo consolidó en el primer lugar del Grupo B.
El rugir de las gargantas aztecas hacía parecer que el Home Depot Center de Carson estaba lleno a su máxima capacidad, cuando en realidad había cerca de 18 mil asientos vacíos.
El grito de “Mé-xi-co, Mé-xi-co, Mé-xi-co” se dejó escuchar, no tanto por las acciones del equipo en el terreno de juego, sino como una extensión a la celebración del boleto conseguido el domingo a la semifinal del torneo.
En realidad fue la selección canalera la que tuvo las primeras dos oportunidades claras de gol.
Al 15′, Rolando Algandona soltó un riflazo que hizo al portero mexicano, Liborio Sánchez, emplearse a fondo para volar y enviar la pelota a tiro de esquina.
El cobro desde el banderín derecho se convirtió en un centro venenoso que remató Roderick Miller y que de no ser otra vez por la intervención del arquero mexicano, la pelota hubiera entrado a las redes.
La doble salvada de Sánchez propició que el grito de “¡portero, portero, portero!” apareciera en el graderío por parte de los seguidores del “Torbellino Negro”.
México saltó al campo de juego con varios jugadores que no habían participado en el torneo en el cuadro titular.
Hiram Mier, Héctor Herrera, Israel Jiménez, Alan Pulido y Marco Fabián, quienes vieron acción en los dos primeros encuentros, se quedaron en la banca.
Fue un cambio táctico por parte del entrenador de México. Luis Fernando Tena, para el juego de ayer, pues mandó a Javier Aquino por la banda izquierda cuando el jugador que pertenece al Cruz azul se desenvuelve mejor por el lado derecho, el cual fue ocupado por Javier Cortés.
Lo que no cambió fue la costumbre del cuadro mexicano de salir a jugar con su uniforme todo en color negro.
Poco a poco la camiseta verde comienza a quedarse como el atuendo alternativo del equipo Tricolor.
Los movimientos tácticos y de personal, mermaron el funcionamiento de México, que no creó ninguna oportunidad de peligro en los primeros 45 minutos, pues el cuadro panameño supo maniatar bien a los atacantes aztecas.
En la segunda parte, la algarabía en la tribuna seguía por parte de los seguidores del conjunto mexicano que, aunque eran pocos, con sus gritos hacían retumbar el inmueble.
El ambiente en las gradas no se tradujo en el funcionamiento de los mexicanos en el terreno de juego.
Fue en tiempo de compensación, al 91′, cuando México anotó el gol del triunfo por conducto de Érick Torres a pase de Jerónimo Amione.
Panamá jugó el partido con mucha dignidad, sabiendo que ningún resultado le ayudaría a pasar a la siguiente ronda.
El cuadro dirigido por Julio Dely Valdés asfixió la salida con balón dominado del cuadro mexicano y cuando recuperaba la pelota lanzaba ataques rápidos aunque sin contar con el peligro requerido para iluminar el marcador.
Con el resultado, México quedó en el primer lugar del Grupo B y el sábado ante Canadá, en Kansas City, peleará por su calificación a Londres 2012; en el otro duelo: Honduras intentará lo propio ante su similar de El Salvador.