Decenas de personas de tres estados ayudan a buscar a Dulce María, niña de 5 años desaparecida en Nueva Jersey
Se mantiene recompensa de $52,000 dólares por cualquier información
NUEVA YORK – Decenas de personas colaboraron este domingo en una nueva batida para encontrar a Dulce María Alavez, una niña de 5 años de origen mexicano desaparecida el pasado 16 de septiembre en un parque de Bridgeton, Nueva Jersey, informaron medios locales.
Las autoridades de Nueva Jersey ofrecen una recompensa de $52,000 dólares por cualquier información que pueda ser útil y han investigado la zona desde que tuvo lugar la desaparición, tras la que se emitió una “alerta ámbar”, que notifica sobre niños secuestrados.
Varias decenas de voluntarios, con destacable número de personas procedentes de otros estados, como Nueva York y Fildelfia, se sumaron pese a la lluvia a las labores de búsqueda convocadas por los allegados de la pequeña, según el diario Philadelphia Enquirer.
De acuerdo al relato de la familia, que el pasado miércoles dio una rueda de prensa para pedir ayuda, Dulce María estaba jugando en el parque con su hermano de 3 años, Manuel, mientras la madre, Noema Alavez Pérez, de 19 años, permanecía en el coche junto a una familiar de 8 años.
La madre estaba revisando la lotería y preparándose para ayudar a su familiar con las tareas escolares cuando ésta le dijo que no podía ver a los niños en el parque, tras lo que encontró a Manuel llorando y llamó a las autoridades para denunciar la desaparición.
La alerta ámbar se emitió el 17 de septiembre, al día siguiente, después de que un testigo –otro niño, según ha trascendido- asegurara que vio a un hombre llevarse a la niña hasta una furgoneta.
Días más tarde, con la ayuda de otro testigo, las autoridades divulgaron el boceto de un hombre que se cree es hispano y al que se considera un testigo potencial pero no un sospechoso.
El FBI, que muestra una fotografía de Dulce María en la lista de personas secuestradas o desaparecidas en EEUU, ha estado en contacto con el padre de la niña, que vive en México.
Días después de la desaparición, las autoridades de Inmigración (ICE) detuvieron al actual novio de la madre de la niña y, aunque fue puesto en libertad, una portavoz de la familia, Jackie Rodriguez, sugirió que el incidente ha sido disuasorio para quien pudiera ayudarles: “Creo que vieron eso y pensaron, no voy a decir nada”.
Un portavoz de ICE dijo al diario que no persigue a los testigos y animó a cualquier persona “independientemente de su estatus (migratorio) a cooperar con las autoridades locales, estatales y federales sin miedo a represalias”.