Medidas protegerán a propietarios

SACRAMENTO.- Los demócratas que controlan la Legislatura de California han presentado un nuevo plan para regular la industria hipotecaria del estado que permite a los dueños de viviendas una mejor posición contra sus prestamistas.

El proyecto de ley, que se proporcionó ayer a The Associated Press, prohibiría a los bancos ejecutar judicialmente las casas que tienen pendientes modificaciones de préstamos, permitiría a los dueños demandar a los proveedores de hipotecas que no cumplen la ley estatal y exigiría a los prestamistas proporcionar un único punto de contacto a los titulares de los préstamos.

El plan es una extensión de un acuerdo nacional que impuso nuevas restricciones en los cinco bancos de mayor tamaño de EE.UU. En el proyecto de ley, que será considerado la próxima semana por un comité legislativo especial, todos los prestamistas de California que procesan más de 175 embargos por año tendrían que adherirse a las nuevas regulaciones.

Los esfuerzos anteriores por reformar la industria hipotecaria de California se han estancado en medio de oposición por parte de los bancos y otros prestamistas, y de republicanos y demócratas moderados a quienes les preocupaba que más restricciones aumentaran los costos de los préstamos y que estancaran aun más la recuperación del mercado inmobiliario del estado. El último plan surgió después de semanas de negociaciones.

El senador Ron Calderon, un demócrata moderado de Monterey Park que se opuso a la legislación original, ahora apoya el proyecto después de ayudar a negociar concesiones claves. Los cambios incluyen dar a los prestamistas la posibilidad de solucionar problemas antes de que los consumidores puedan iniciar demandas, limitar costosas y molestas demandas, y exonerar a los pequeños prestamistas de algunos de los requisitos.

“Nos concentramos fundamentalmente en dos principios: trato justo a los prestatarios y mantener a la economía de California en el buen camino”, dijo Calderon. “Creo que logramos un buen equilibrio”.

Beth Mills, portavoz de la Asociación de Banqueros de California, dijo que su organización todavía estaba revisando el proyecto de ley, pero en principio cree que todavía es demasiado amplia y que podría permitir demandas sin fundamento por parte de prestatarios que no pueden pagar para permanecer en sus casas.

Dustin Hobbs, portavoz de la Asociación de Banqueros Hipotecarios de California, dijo que era demasiado temprano para que su organización adoptara una posición, pero criticó al comité por programar una votación para la próxima semana.

Mientras tanto, una coalición de dueños de viviendas, grupos Ocuppy, sindicatos y otros, anunciaron que se reunirán el lunes en el Capitolio para pedir una moratoria en todos los embargos, algo que va mucho más allá del acuerdo legislativo.

El paquete: – Permitiría que los dueños de viviendas inicien juicio a los proveedores de hipotecas si no cumplen la ley estatal, pero solo si hay una violación significativa. Los dueños podrían pedir a los jueces que detengan embargos pendientes pero podrían cobrar daños y perjuicios solamente si se realizara el embargo judicial. Los prestamistas serían responsables por daños triples si cometen violaciones deliberadas, imprudentes o intencionales.

– Daría a los prestamistas la posibilidad de solucionar problemas con prestatarios individuales por su cuenta, antes de que se les apliquen multas, una demanda clave de la industria bancaria.

– Exigiría a los prestamistas que proporcionen un único punto de contacto para los prestatarios que quieren hablar sobre embargos o refinanciación, con una exención para los prestamistas más pequeños.

– Prohibiría lo que se conoce “embargos por dos vías”, prohibiendo a los prestamistas presentar avisos de incumplimiento, avisos de ventas, o llevar a cabo ventas por ejecución hipotecaria al mismo tiempo que consideran alternativas a los embargos como modificaciones de préstamos o ventas cortas.

– Aumentar las multas para los bancos que aprueban ejecuciones hipotecarias sin revisar adecuadamentela documentación, un proceso conocido como robo-firma. Pero la multa civil de 7,500 dólares estaría limitada a una por cada préstamo, no una por cada documento presentado de manera incorrecta, como temían los prestamistas.

Mientras que algunos cambios serían permanentes, otros como las penas más altas para la robo-firma terminarían después de cinco años, en deferencia a los argumentos de los banqueros de que los legisladores pedían una solución permanente para lo que fueron excesos temporales según los prestamistas.

Los demócratas tienen grandes mayorías en ambas cámaras, y pueden aprobar el proyecto sin los votos republicanos, siempre que suficientes demócratas moderados acepten el acuerdo. Está programado un voto de toda la Legislatura antes de que los legisladores partan para un receso de verano de un mes a comienzos de julio.

Grupos de consumidores y sindicatos laborales han presionado fuertemente a los legisladores para aprobar las protecciones para dueños de viviendas pedidas por la fiscal general Kamala Harris, demócrata que ayudó a negociar el acuerdo de febrero que exige que los bancos paguen 18,000 millones de dólares en multas a dueños de viviendas en California. El acuerdo incluyó a Bank of America Corp., JPMorgan Chase & Co., Wells Fargo & Co., Citigroup Inc. y Ally Financial Inc., pero excluyó a otros prestamistas.

Harris dijo que la nueva propuesta ayudaría a los prestamistas a permanecer en sus casas si pueden pagar.

El acuerdo se logró después de que versiones iniciales de las propuestas de Harris se hundieran en comités regulares. Eso obligó a los líderes legislativos a crear un comité de conferencia especial para dar un rodeo a los procedimientos normales.

Darrell Steinberg, demócrata de Sacramento, presidente pro témpore del Senado,ha dicho que la aprobación de las reformas hipotecarias es clave para la estragia electoral de los demócratas y son necesarias para ayudar a convencer a los votantes de aprobar la propuesta del gobernador Jerry Brown en noviembre de aumentar temporalmente los impuestos sobre las ventas y las rentas para financiar programas estatales.

Mark Hedlund, portavoz de Steinberg, dijo que los demócratas confían en que el proyecto revisado pueda ser aprobado en el comité de conferencia y en la Legislatura completa.

“Hemos encontrado un punto medio en algunos asuntos que eran difíciles para los partidos en ambos lados del asunto”, dijo Hedlund.